Se cimbreaba por entre las amplias mesas hasta que, al alcanzarnos, se entregó a un pronto impetuoso. Empuñaba el bastidor sobre el que dibujaba su bordado, mientras se aferraba a una pequeña figura de madera ensamblable que bien podría representar a la Purísima vestida de soles. Y venga a recorrer vigoroso el aula: que si tarjeteros por allí, abridores por allá. «Atención, la prensa de encolado». Guirnaldas, postales navideñas, figuras de fieltro, adornos para el árbol. Agitado, Adrián insistía a sus compañeros en que mostrasen en lo que estaban trabajando. El joven, de 24 años, es una de las 110 personas que acuden cada mañana, de 09.00 a 16.30 horas, al Centro Ocupacional, de Formación, Oportunidades e Inserción Laboral de... Ver Más