El rotundo triunfo de José Antonio Kast en el balotaje está destinado a ejercer una profunda influencia en Chile. Se consolida una sólida fuerza de extrema derecha, neofascista, como producto de la convergencia de dos variantes radicales del pinochetismo -una liderada por Kast y la otra, aún más extrema, por Johannes Kaiser- a las cuales se plegó la abanderada de una ficción llamada “derecha democrática” encarnada por la ex alcaldesa de Providencia, Evelyn Matthei, supuesta heredera del legado de Sebastián Piñera.