Las trabas urbanísticas contadas por uno de los pocos desarrollos que surfeó la burbuja inmobiliaria

Valdebebas, desarrollo urbanístico del noreste de Madrid, completará en las próximas semanas su fase de gestión urbanística, con la disolución de la junta de compensación, órgano que aglutinó a los propietarios de los suelos para la urbanización (construir las calles y la redes) y puesta en marcha de este nuevo barrio con más de 14.000 viviendas. Este hito, que se completa 28 años después de la concepción del desarrollo, que marca el final de toda la tramitación y gestión urbanística —más allá de que por el camino ya se han construido numerosos edificios— ocurre después de un listado infinito de trabas: más de 700 informes, mas de 200 procedimientos judiciales contra licencias de obras y primera ocupación, silencios administrativos, lentitud en la concesión de licencias o, incluso, la derogación de su planeamiento hasta en dos ocasiones y tres proyectos de reparcelación son algunos de los periplos que sorteó Valdebebas para ser una realidad, un escenario adverso que viven multitud de nuevos desarrollos a lo ancho y largo de todo el territorio nacional.