Manuel Romero, especialista en aparato digestivo, explica qué es la hepatitis A y sus síntomas: «La mayoría de los jóvenes no están inmunizados»

Un brote de hepatitis A ha encendido las alarmas sanitarias en Sevilla tras detectarse trece casos en la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de Sevilla. En total, trece personas resultaron afectadas, de las cuales diez requirieron ingreso hospitalario, aunque todas han evolucionado favorablemente y ya han recibido el alta. La Consejería de Salud activó de inmediato los protocolos de vigilancia epidemiológica para frenar la propagación del virus y esclarecer el origen de los contagios, que, por el momento, parecen estar contenidos y sin nuevos casos registrados en las últimas semanas. Así pues, actualmente, se considera que la situación está bajo control, al tiempo que actividades académicas continúan con normalidad en la Facultad de Bellas Artes. No obstante, para comprender el alcance real de este brote, Manuel Romero, jefe de servicio de Aparato Digestivo del Hospital Universitario Virgen del Rocío , atiende a ABC de Sevilla para explicar también los riesgos asociados a la hepatitis A y las claves para su prevención. «Aunque se quede en nada como este brote, ha habido muchas hospitalizaciones (diez de trece) y tenemos que evitarlo. Por mano del demonio, en personas con comorbilidades con cirrosis hepática, puede ser muy grave. En un grupo de adolescentes, como estos estudiantes de Bellas Artes, es probable que sea meno grave «, afirma con respecto a este caso concreto que se ha dado en la Universidad de Sevilla. Lo primero que debe saberse tras este brote es, exactamente, qué es la hepatitis A. Como respuesta, el doctor Romero señala que «es una hepatitis de transmisión fecal-oral que se transmite con lo que se come, por comer alimentos contaminados «. Ahondando más en la cuestión, añade que »este virus es de tipo ARN, que una vez que entra en el organismo va directamente al hígado y produce una hepatitis . Cuando se elimina, lo hace por la bilis y, de ahí, a las heces. Y a través de la contaminación de las heces es lo que hace que el virus se vaya replicando y transmitiendo. Por lo tanto, se trata de una hepatitis viral, que se caracteriza por ser aguda. Además, puede provocar un fallo hepático fulminante y necesitar un trasplante para poder superarlo«. Al hilo de lo anterior, con respecto a cómo se manifiesta la hepatitis A en quienes la padecen, este jefe de servicio de Aparato Digestivo del Virgen del Rocío afirma que « cuanto más joven es la persona, menor es la manifestación clínica . Conforme empiezan en la edad adulta se producen casos y aparecen con un cuadro clínico de hepatitis aguda. Es una viriasis, un mal cuerpo, cansancio y, en algunos casos, aparece la ictericia , que es que el paciente se pone amarillo, la piel y el blanco de los ojos. Ahí, lo primero que sospechamos es una hepatitis aguda, pero la mayoría son lo que llamamos anictéricas, que pasarían desapercibidas«. Haciendo hincapié en los trece casos que se han producido en la Facultad de Bellas Artes de Sevilla, este profesional de la salud lo achaca a un aspecto de nivel más general. Y es que «la tasa de personas que están inmunizadas frente a la hepatitis A, hablamos de personas con anticuerpos, va cayendo con el paso del tiempo . Ahora, la mayoría de los jóvenes no los tienen, por lo tanto son mucho más susceptibles de sufrir una hepatitis A«. Asimismo, enfatizando todavía sobre este reciente caso en la capital hispalense, sostiene que »esto tiene que tener un foco. Una persona que está eliminando virus ha puesto en marcha la transmisión en un entorno más o menos cerrado, como la Facultad de Bellas Artes. Según me han dicho en la Universidad, ha sido entre alumnos que no están relacionados , como es lógico cuando ocurren este tipo de situaciones«. Con lo cual, para evitar brotes como este, la clave es protegerse por medio de vacunas. Sin embargo, el doctor Romero recuerda que esta concretamente «no está incluida en la vacunación universal, así que no todos los niños se vacunan de hepatitis A . Es opcional. Hay padres que vacunan a sus hijos y otros que no. Eso hace que no todos estén protegidos. Desde el punto de vista médico, esta es una de nuestras reivindicaciones más importantes. Deberíamos conseguir la vacunación masiva de toda la población porque es la mejor forma de acabar con la hepatitis«. Hablando desde su propia experiencia, ante un caso de hepatitis A, este médico del Hospital Virgen del Rocío señala que «todas las medidas que hacemos son de mantenimiento. Cuidamos el hígado, lo mimamos y evitamos que falle . Lo malo, cuando una persona coge una hepatitis A, es que se complique, que haya un fallo hepático fulminante y necesite un trasplante. Entonces, cuando una persona llega al hospital y hay una sospecha de un brote, una vez hacemos el diagnóstico, aislamos al paciente . Una vez aislado, nos ponemos a trabajar para vigilar que el hígado esté funcionando bien y no tenga ninguna complicación«. Por otra parte, como medidas de prevención para evitar el contagio, destaca que hay que «adoptar todas las medidas higiénico-dietéticas que tienen que seguir todos los manipuladores de alimentos, los cuales deben estar vacunados frente a la hepatitis A. También, seguir las medidas higiénicas que todos aplicamos en el día a día ; el lavado de manos, evitar contacto de productos fecales con el exterior... Evidentemente, todas las personas que trabajan manipulando alimentos y de cara al público necesitan seguir estas medidas de forma muy estricta y precisa«.