Que los gatos tienen siete vidas no es cierto biológicamente hablando; tienen una como todo bicho viviente y punto. Pero que parece que sí cuentan con vidas extra también es verdad. No hay más que ver en la de líos que se meten, cómo trepan por sitios insospechados o se lanzan temerariamente desde grandes alturas sin que en muchas ocasiones les pase absolutamente nada.