La victoria de José Antonio Kast en la segunda vuelta de la elección presidencial de Chile no sólo representa un triunfo para él y su partido político, sino también para la ideología de derecha que poco a poco comienza a tomar fuerza de nuevo y extenderse por el continente americano.El abogado de tendencia ultraderecha representa el regreso de una política pinochetista con raíces en el modelo económico neoliberal instalado en el país a partir de la década de los años 70, tras la caída de Salvador Allende por el golpe de Estado de Augusto Pinochet. Aquí hacemos un recorrido por los países de América Latina.Chile: José Antonio KastHay que empezar por el más reciente de los casos; Chile, que a partir de marzo del próximo año será gobernado por la política de derecha de Antonio Kast, luego de que Gabriel Boricliderara el país desde el 11 de marzo de 2022.Desde antes de salir victorioso —con el 58.17 por ciento de los votos— las propuestas de Kast iban desde ajustes fiscales, con un recorte de 6 mil millones de dólares en los primeros 18 meses, hasta la reducción de impuestos y la desregulación de la economía del país.Además de endurecer el control estricto a la migración, prometiendo deportaciones masivas, y mano dura contra el delito.Tras su triunfo, Kast agradeció al resto de los candidatos de derecha que apoyaron su candidatura, habló reiteradamente del combate al delito, de la importancia del orden y del castigo y retomó el tema de la migración, una constante durante su campaña.“Sin seguridad no hay paz, sin paz no hay democracia y sin democracia no hay libertad; Chile volverá a ser libre del crimen, de la angustia y del temor”; también se comprometió a mejorar la educación y el empleo.El triunfo de Kast, que tuvo sus orígenes en una agrupación política formada por partidarios de la dictadura pinochetista, pone en evidencia que en Chile subyace una trama de violencia no tramitada en su historia reciente, pero también lo acerca a países con la misma ideología, como Estados Unidos.Sobre su triunfo, la presidenta Claudia Sheinbaumseñaló que en México no se dará un triunfo de la derecha en las elecciones presidenciales, después de que José Antonio Kast ganó los comicios en Chile.Bolivia: Rodrigo Paz PereiraUno de los casos más sorprendentes de la lista es el de Bolivia, un país que históricamente se caracterizó por estar construido en los pilares de la izquierda del siglo XXI, pero que con un golpe de Estado (el del 2024) y el restablecimiento de las relaciones bilaterales de ese país con Estados Unidos fueron suficientes para cambiar de aires.Aunque sus ideas rayan entre la derecha y la izquierda, durante su campaña presidencial, Paz Pereira fue y será recordado por su lema "Capitalismo para todos". El hombre prometió acabar con lo que llamó el "Estado tranca" con el objetivo de dar más recursos a las regiones bolivianas y cortar los "gastos superfluos" en el Estado.También propuso legalizar los vehículos que ingresaban a Bolivia sin papeles. Sin embargo, cuando se acercaba la segunda vuelta de elecciones, Rodrigo Paz Pereira adoptó un tono más populista para ganar votos de izquierda que abandonaron a los socialistas, pero que desconfiaban de los recortes económicos."Desde el día uno tendremos combustible, tendremos incentivos tributarios", dijo Paz en un debate televisado el 12 de octubre. "Se respetarán todos los beneficios sociales", prometió el hoy presidente.Argentina: Javier MileiEn uno de los países donde la derecha parece haberse afianzado es en Argentina, de la mano de Javier Milei, que, aunque su gobierno está cerca de llegar a la mitad de su camino, la gente ha visto con buenos ojos su trabajo.El economista siempre defendió la ideología libertaria, que aborrece la intervención del Estado en el libre mercado, y a partir de ella elaboró un proyecto de gobierno que consiste en reducir el gasto público y los impuestos al mínimo.Como candidato, Milei blandió una motosierra para representar los recortes que quiere hacer al Estado, ya sea con la eliminación de ministerios de gobierno o con la venta de empresas públicas al capital privado; promesas que mantiene como presidente electo.Entre sus pilares ideológicos de Milei siempre sobresalió el hecho de que "todo lo que hace el sector público lo hace mal (sic)", por lo cual apoyaba la administración del sector privado."Mi responsabilidad es resolver problemas. Y van a ser resueltos dentro de mi perspectiva liberal, es decir: el respeto irrestricto al proyecto de vida del prójimo, sujeto al principio de no agresión y en defensa del derecho a la vida, a la libertad y a la propiedad", dijo en una entrevista antes de tomar la presidencia de Argentina.Paraguay: Santiago PeñaCon la idea de que todos los paraguayos estén mejor y que el mundo sea testigo del resurgir de un país que calificó como “gigante”, Santiago Peña asumió la presidencia de Paraguay en 2023.En ese momento, países como Argentina, con Alberto Fernández; Brasil, con Luiz Inácio Lula da Silva; Uruguay, con Luis Lacalle Pou; Bolivia, con Luis Arce; y Chile, con Gabriel Boric, eran liderados por políticos de izquierda, por lo cual la idea de Peña era posicionar a Paraguay en Latinoamérica con una idea más conservadora, fortaleciendo su producción mundial de alimentos.Perú: José JeríEl Perú de José Jerí se rige bajo los ideales de la agrupación Somos Perú, que es autodefinida como de tendencia social-cristiana con matices conservadores.Jerí nunca se destacó como líder político ni como orador o ideólogo. Poco se sabe sobre su ideario. Consiguió escalar en posiciones de poder a fuerza de acordar y acompañar propuestas según conveniencia.Así llegó a ocupar en 2024 la presidencia de la Comisión de Presupuesto en el Congreso, lo que le permitió convertirse en una pieza clave de negociación para alcaldes y gobernadores, que dependen para su supervivencia de transferencias del Estado.Asumió la presidencia de Perú con la declaración de estado de emergencia, que garantiza la impunidad para la represión policial contra la protesta social.El hombre también impulsó un cambio en el Código Penal para incorporar el delito de revelación de información reservada, que la Asociación Nacional de Periodistas de Perú ha rechazado por considerarla una amenaza contra la libertad de información.Ecuador: Daniel NoboaAl inicio del gobierno de Daniel Noboa, Ecuador atravesó por una crisis social y de inseguridad que llevaron al mandatario a asumir políticas que rayaban entre la izquierda y derecha.Estudiado en prestigiosas universidades extranjeras, Noboa se define de centroizquierda, aunque lo apoyan fuerzas de derecha.El político llegó a la silla presidencial mediante la plataforma Acción Democrática Nacional (ADN), una coalición política creada para apoyar la candidatura de Daniel Noboa en las elecciones presidenciales de 2023 y luego de haber cumplido el sueño frustrado de su padre de alcanzar el Poder Ejecutivo de su país.El movimiento de Noboa es cercano a las ideologías de conservadurismo liberal, conservadurismo libertario, neoliberalismo y populismo de derecha.Panamá: José Raúl MulinoDesde antes de que asumiera la presidencia de Panamá, José Raúl Mulino era descrito como un abogado derechista con fama de autoritario. Durante su campaña causó polémica tras declarar que iba a cerrar Darién, la selva panameña que cruzan los migrantes rumbo a Estados Unidos.A lo largo de su gestión, el panameño ha dejado frases como muestra de su fuerte carácter: "El gobierno es el que manda y, si se equivoca, vuelve y manda".Cuando fue ministro de Seguridad del gobierno de Martinelli (2009-2014), durante una oleada de protestas, llamó a gritos "maleantes de mierda" a un grupo de trabajadores que bloqueaban el tránsito.En la década de 1980, fue parte de la llamada Cruzada Civilista, un grupo opositor al general Manuel Antonio Noriega, quien fue derrocado con la invasión estadunidense en 1989.Tras el fin de la dictadura, fue por un tiempo canciller en el gobierno democrático de Guillermo Endara (1989-1994). En la administración de Martinelli fue brevemente ministro de Gobierno y Justicia, y luego de Seguridad.Posteriormente, estuvo en prisión preventiva por supuesta corrupción entre 2015 y 2016, pero fue liberado por errores procesales. Dice que fue "preso político" en ese lapso."Sin que esto sea algo escrito en piedra, yo soy una persona de centroderecha, para la izquierda no voy a coger nunca", aseguró hace unas semanas.Costa Rica: Rodrigo Chaves RoblesEn 2022, el derechista Rodrigo Chaves Robles fue evaluado como el mejor presidente de Latinoamérica, a pesar de que su discurso siempre se ha centrado en la severa crisis económica que vive el país, con cifras de pobreza, inflación y deuda externa cada vez más altas.Esto a pesar de que Costa Rica aparece constantemente en los índices de los países más "felices del mundo" año tras año.Desde antes de que Chaves Robles asumiera la presidencia, Costa Rica terminó con 60 años de bipartidismo controlado por el Partido Acción Ciudadana.El Salvador: Nayib BukelePese a generar varias opiniones encontradas, el gobierno de Nayib Bukele logró transformar a El Salvador, una pequeña nación de alrededor de 6 millones de habitantes, caracterizada por la pobreza y la presencia de pandillas como la Mara Salvatrucha, en un modelo de país que varios admiran.Entre 1979 y 1992, El Salvador protagonizó una serie de guerrillas, como la mayoría de los países en América Latina, con la diferencia de que eran protagonizadas por las pandillas de criminales que operaban en la nación.Esta guerra civil provocó una migración masiva a Estados Unidos por parte de miles de salvadoreños que se asentaron en barrios peligrosos de Los Ángeles, donde nacerían las dos principales pandillas de Centroamérica, la Mara Salvatrucha y Barrio 18.Ante el rápido crecimiento de estas pandillas en Estados Unidos, el gobierno de Ronald Reagan decidió comenzar con deportaciones masivas a El Salvador, que apenas comenzaba a recuperarse de su guerra civil, lo que facilitó que tomaran el poder de varias regiones.Sin embargo, con la llegada de Bukele su gran logro ha sido disminuir la violencia y los homicidios en el país aplicando una estricta política de seguridad en la que los pandilleros son mandados a cárceles de El Salvador.En la columna de Mael Vallejo para MILENIO se califica al gobierno del presidente de El Salvador como: "Bukele no es un político que milite en la izquierda o derecha tradicional, sino el creador de un populismo que ha evidenciado que, para un país entero, vivir en una democracia tiene menos importancia que sentirse seguros cuando salen a la calle".Por su parte, Bukele, que en la red social se describe como "un instrumento de dios en nuestra nueva historia", ha lanzado constantemente cuestionamientos a los roles de algunos organismos como la misma ONU.Su gobierno busca dar un giro a otros mandatos que hubo en el país, haciendo referencia principalmente a los últimos 30 años de El Salvador, tras la guerra civil, donde los bloques Alianza Republicana Nacionalista y Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional dominaron la administración del territorio, el primero con cuatro presidentes y el otro con dos.Durante ese tiempo, las tres décadas a las que hace referencia Bukele, El Salvador estuvo marcado por la corrupción y las pandillas, donde el poder de las maras se hizo presente en las cárceles y calles, sin importar si quien estaba en la administración presidencial era de derecha o de izquierda.Con su llegada a la Casa Presidencial de El Salvador y sin pertenecer a los dos emblemáticos bloques, Nayib Bukele ha hecho constantemente rechazos a las tomas de decisiones de sus antecesores; los ahora ex magistrados fueron señalados por el mandatario, quien los acusó de no permitirles en su momento cuidar la vida de sus ciudadanos.República Dominicana: Luis AbinaderLa gestión de Luis Abinader sorprendió a todos cuando logró que su país no sufriera los estragos económicos ocurridos durante la pandemia del covid-19.El éxito de Abinader al guiar a su nación a través de la crisis global sin precedentes fue la base de su arrolladora victoria para convertirse en presidente de República Dominicana.El gobierno de Abinader también ha fortalecido las leyes electorales del país, lo que provocó elogios de la Organización de Estados Americanos (OEA), que destacó los cambios de políticas para fortalecer la transparencia y la equidad en el financiamiento de campañas.Sin embargo, "el gobierno de Abinader ha enfrentado críticas por no poder —o no querer— llevar a su propia gente ante la justicia, especialmente a aquellos de su círculo más cercano", dijo Vicente Romero, un político de República Dominicana con residencia en Estados Unidos.Desde el inicio de su mandato, en agosto de 2020, ha donado su salario como presidente a programas sociales, lo cual apunta a una ideología más de izquierda, aunque en realidad el Partido Revolucionario Moderno (PRM), al que representa, tiene inclinaciones por la centroderecha.Factor EUHay que recordar que Marco Rubio, el secretario de Estado de la administración Trump, tiene una agenda ambiciosa a desarrollar en América Latina. El movimiento MAGA (Make America Great Again) tiene una dimensión en Latinoamérica: América para los americanos.Países de izquierdaCon el reciente triunfo de José Antonio Kast, son nueve los países de Latinoamérica con un gobierno de izquierda:MéxicoHondurasCubaGuatemalaNicaraguaColombiaVenezuelaBrasilUruguayRM