El subdelegado del Gobierno en Jaén, Manuel Fernández, ha presentado una Campaña Especial de Vigilancia y Control del Alcohol y las Drogas que se desarrollará hasta el próximo domingo 21 de diciembre. Desde uno de los puntos de control, situado en la A-44, ha explicado que la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil “realizará servicios de vigilancia y control del tráfico, junto con las policías autonómicas y municipales, con especial atención al consumo de alcohol y otras drogas en las vías de circulación”. Fernández ha advertido del grave peligro que supone esta conducta al volante, ya que, según ha subrayado, “multiplica el riesgo de siniestro y agrava las consecuencias en caso de accidente”. Ha insistido en que, aunque una persona se crea en pleno uso de sus facultades, la ingesta de alcohol eleva drásticamente la probabilidad de sufrir un siniestro. El subdelegado también ha señalado que “el alcohol no sólo está relacionado con una mayor accidentalidad, sino que también repercute en una mayor mortalidad, al ser un factor relacionado con un peor pronóstico en las lesiones sufridas”. Por ello, ha hecho un llamamiento a la responsabilidad para impedir que personas que han bebido conduzcan. Estas campañas, según Fernández, son una herramienta clave para analizar los factores de riesgo. En este sentido, ha destacado que “el alcohol sigue siendo la sustancia más detectada en los conductores fallecidos, seguido de la cocaína y el cannabis”. Además, el perfil más común es el de hombres que conducían un turismo o motocicleta, con una alta proporción de siniestros mortales en días festivos. En el acto también ha participado Fernando Cañada del Castillo, tesorero de ASPAYM Jaén, quien ha puesto en valor la campaña que la asociación desarrolla desde 2007 bajo el lema “No corras, no bebas, no cambies de ruedas”. En esta iniciativa, personas voluntarias con lesión medular se acercan a los conductores para mostrarles de forma directa las secuelas irreversibles de las imprudencias.