El empate sin goles entre Rayo Vallecano y Real Betis en Vallecas dejó un protagonista, y no por lo sucedido durante el tiempo reglamentario. Aitor Ruibal fue el nombre propio del encuentro que cerró la decimosexta jornada de LaLiga EA Sports tras el pitido final del colegiado. El empate dejó poco fútbol y escasas ocasiones, pero el pospartido trajo consigo una escena que volvió a poner el foco en un problema que el deporte arrastra desde hace años y que sigue sin erradicarse del todo: la homofobia en los estadios. Como es habitual después de los 90 minutos de rigor, un jugador del Betis se acercó a la zona flash para atender a la televisión con derechos. En esta ocasión fue Aitor Ruibal, entrevistado por Mónica Marchante en los micrófonos de Movistar LaLiga. Mientras analizaba el encuentro, un seguidor, desde la grada de Vallecas, lanzó un comentario dirigido directamente al futbolista: "Ruibal, píntate las uñas", junto con un insulto de carácter homófobo. "Ale, homófobo..." ️ La respuesta de Aitor Ruibal tras un grito desde la grada de Vallecas. #LALIGAEASPORTS #LaCasaDelFútbol pic.twitter.com/TSG5fs9CwS — Fútbol en Movistar Plus+ (@MovistarFutbol) December 15, 2025 Ruibal no miró hacia otro lado. Detuvo brevemente su intervención y respondió con naturalidad y firmeza: "¡Ale, homófobo! Bueno, da igual, esto me pasa en todos los partidos, no pasa nada…". Acto seguido, retomó el análisis deportivo sin elevar el tono ni dramatizar la situación. La escena duró apenas unos segundos, pero fue suficiente para convertirse en uno de los momentos más comentados de la jornada. Normalizar sin callar Lejos de convertir el episodio en el centro de su discurso, Ruibal optó por no darle protagonismo, aunque sí por poner nombre a lo ocurrido. "No hay que darle más bola", insistió, dejando claro que no era la primera vez que recibía comentarios de este tipo, ni en los estadios ni en redes sociales. El futbolista del Betis explicó en una entrevista al Club del Deportista en 2023 que le "daba igual" lo que pensara la gente al pintarse las uñas: "Lo primero es que lo hago porque me gusta. Me da igual lo que piense la gente: si le gusta, bien, si no, también. Desde que he empezado a hacerlo veo, además, que tiene motivos muy buenos que me alegran, y si encima de hacerlo porque me gusta se critica menos a la gente que lo hace pues mucho mejor. Ver a niños pequeños que también se pinten las uñas y no tengan miedo a sufrir bullying o a cualquier cosa es algo que te impacta". Ese mismo año, tanto él como Borja Iglesias fueron objeto de ataques en redes sociales por acudir con bolso a una boda, una polémica que entonces ya abrió un debate sobre masculinidad, fútbol y tolerancia. Ruibal siempre ha defendido la misma idea: hacer lo que le gusta sin que eso deba ser motivo de señalamiento. Y en Vallecas volvió a hacerlo, esta vez en directo y sin guion. El fútbol y lo que aún...