Competencia advierte a Yolanda Díaz que subvencionar a los bancos éticos puede constituir ayudas de Estado

La CNMC advierte al Ministerio de Trabajo que debe "definir con mayor precisión" cuáles son las entidades de finanzas éticas y justificar los requisitos que se imponen para su cumplimiento El Gobierno aprobará una norma para fomentar la banca ética: con límites a los sueldos y sin inversión en armamento La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha advertido al Ministerio de Trabajo que el real decreto con el que pretende fomentar las entidades de finanzas éticas carece de precisión y que las subvenciones previstas en la norma podrían ser consideradas como ayudas de Estado, por lo que deberían cumplir con la normativa europea. Competencia ha emitido su informe sobre el proyecto de real decreto que está preparando el equipo de la vicepresidenta Yolanda Díaz, una norma con la que el Ministerio de Trabajo pretendía exponer las mejores prácticas en el sector financiero (límites a salarios de directivos o no inversión en actividades determinadas, como juegos de azar o armamento) a cambio de promoción pública o ayudas específicas. El organismo presidido por Cani Fernández pide “cautela” a la hora de diseñar estas subvenciones y actividades de promoción, ya que debería cumplir con la normativa de la Unión Europea en relación con las ayudas de Estado. Sugiere, asimismo, incorporar criterios objetivos para valorar el impacto social y medioambiental de los proyectos que aspiren a recibir estos fondos. Definiciones imprecisas Competencia reclama, además, que el Ministerio defina “con mayor precisión” cuáles son esas entidades de finanzas éticas y que justifique “la necesidad y proporcionalidad de los requisitos impuestos”. “Una delimitación insuficiente podría generar inseguridad jurídica o imponer restricciones injustificadas en el acceso a las medidas de apoyo, impulso y fomento previstas”, advierte la CNMC. “La falta de precisión de conceptos clave como 'impacto social positivo' o 'criterios éticos', que carecen de una definición objetiva y verificable en la norma, lo que otorga a la Administración un margen de apreciación excesivamente amplio a la hora de calificar a una entidad como de finanzas éticas o no”, cuestiona Competencia. El real decreto debería establecer “indicadores claros, parámetros verificables y procedimientos de acreditación” que evalúen el cumplimiento de los requisitos por parte de las entidades y proyectos beneficiarios. En términos generales, la CNMC considera positiva la iniciativa en tanto que “puede contribuir a dinamizar el juego competitivo, derivando en beneficios para la colectividad en su conjunto”, particularmente para “los colectivos vulnerables”.