Mireddys González , quien fuera durante casi tres décadas la mujer del reguetonero Daddy Yankee , ha presentado esta semana una nueva demanda contra su exmarido, cuyo nombre real es Ramón Ayala Rodríguez, exigiéndole 50 millones de dólares (unos 42.5 millones de euros). Le acusa de incumplir su acuerdo y organizar un plan para dejarla sin acceso a unos fondos que ya se habían depositado en su cuenta personal. Por poner las cosas en contexto, en octubre Mireddys y Daddy Yankee consiguieron poner fin a la disputa económica que precipitó su divorcio . El reguetonero consideraba que su ex y la hermana de esta habían estado haciendo movimientos en su patrimonio sin permiso, y ella reclamaba que llevaba casi 30 años trabajando para las dos empresas del cantante, El Cartel Records y Los Cangris, Inc. Sin embargo, consiguieron encontrar un punto en común en el que el artista podía aún usar las marcas profesionales que identifican su carrera. Poco después fue Daddy Yankee quien volvió a demandar y acusó a su exmujer de haber borrado documentos que acreditaban esos movimientos patrimoniales. El acuerdo final, que llegó en diciembre después de todo el año peleándose por la división económica en el divorcio que se firmó en febrero , indicaba que tenían que repartir de manera equitativa los 100 millones de dólares en dividendos. Es decir, a cada uno le corresponderían 50 millones que debían ingresarse en la cuenta personal de cada uno. Y así fue, las resoluciones corporativas se firmaron debidamente, pasaron por la notaría y se remitieron a FirstBank para que ejecutara las transferencias. Pero según Mireddys, en solo 24 horas después de que los fondos aparecieran en su cuenta, fueron revertidos y eliminados. Un movimiento que la demandante no considera accidental ni administrativo, sino un plan «coordinado» entre Daddy Yankeee y los dos bancos implicados, a quienes acusa de apropiación indebida . La ex del artista asegura que la reversión de los fondos constituye una admisión implícita de que este presionó a las entidades para llevar a cabo la operación sin tener autoridades legal para ello. Es por eso que Mireddys incluye por primera vez en su demanda a los dos bancos implicados, que son FirstBank y Oriental Bank. Y exige además de que se le devuelvan los 50 millones, daños compensatorios y estatuarios , además de medidas cautelares que prevengan que esto se repita en el futuro, y exige al juzgado una declaración que establezca la ilegalidad de lo ocurrido.