La dependencia en Andalucía es uno de los temas más sensibles del debate político porque no se maneja con ladrillos, objetos o herramientas, sino con personas en situación de vulnerabilidad. Además, nunca es suficiente, y menos en una tierra que parte desde el sótano y la movilidad resulta más compleja por sus dimensiones. Pero la consejera de Igualdad, Inclusión Social, Juventud y Familias, Loles López, ha optado por ser decidida, osada y audaz para iniciar una incursión por una senda alternativa con el fin de solventar una lacra que se había adherido a la piel de la región. López ha sido la invitada del Foro ABC desarrollado en La Galería , con el patrocinio de Clece, y que ha contado con la presencia del director general de ABC en Andalucía, Álvaro Rodríguez Guitart, y una nutrida representación de viceconsejeros, delegados provinciales y municipales. El director de ABC Sevilla, Alberto García Reyes, contextualizaba el evento, destacando que en la comunidad «trabajan entre 45.000 y 50.000 auxiliares que atienden a más de 169.000 personas». «La Junta ha ido aumentado el precio de plaza/hora, con 134 millones de euros destinadas a residencias y centros de día», recordaba, resaltando el «desequilibro en la financiación estatal de la dependencia» , ya que el Gobierno no alcanza en Andalucía ni siquiera el 30% de la inversión. «El gran reto es acortar los plazos de espera . Los cambios sociales exigen cambios permanentes en la administración«, enfatizaba. Una revolución sostenida en »el empeño de Loles López«, la consejera que ha afrontado al fin »el gran desafío de la dependencia en Andalucía«. Precedía a la política popular Javier Gallego Trigo, director regional de la dirección sur de Clece y filiales, quien repasaba «los hitos de la certidumbre» logrados desde 2023. «La Junta ha estado revisando el precio, un año tras otro», reconocía, «y lo hemos hecho bien todas las partes», desde el sector hasta los sindicatos. «Pero ahora estamos en un momento especial. El coste va a subir significativamente en 2026 y 27 pues se ha metido un elemento externo que es el SMI (Salario Mínimo Interprofesional). El año que viene estará según las estimaciones entre un 7 y un 7,5% superior al convenio del 2025«. Reflejaba que »antes se presentaban para la licitación entre 40 y 50 empresas; el año pasado se presentaron de media siete a los concursos y este año han sido cuatro. Hay menos concurrencia« porque no es rentable. Así que pidió en su carta a los Reyes Magos »poder adelantar la revisión de los precios«. Recogía la consejera esa misiva, aduciendo que no se puede pronunciar aún con certeza pues la financiación es mixta y depende de los Presupuestos Generales del Estado . « Estamos peleando una subida , en la misma línea de los años anteriores, pero tenemos que conocer esas cuentas, si habrá un incremento o una reducción. La incertidumbre es completamente comprensible«, admitía López, que desplegaba sobre el Salón Victoria todas esas cifras estadísticas que demuestran que »la gestión da resultados«. La consejera rememoraba su visita a este mismo foro, «hace 22 meses», cuando el director Alberto García Reyes le preguntó si de verdad estaría dispuesta a emprender ese camino del cambio. «Dije que iba a ser necesario mucho esfuerzo y mucho tiempo. Pero se hizo, y la gestión da resultados«. «Había que cambiar el modelo porque en realidad eran ocho modelos de dependencia , uno por cada provincia. Era farragoso y poco eficaz«, insistía. »Había cinco aplicativos que además no estaban conectados entre sí. Un mismo expediente se copiaba cuatro o cinco veces, por lo que la posibilidad de error y de duplicidad era muy grande. Este nuevo aplicativo único nos da la trazabilidad y permite saber en qué fase está el expediente«. El segundo cambio del sistema, con el decreto de simplificación administrativa, dejaba el modelo en una única visita del especialista. «Todo ello reduce los plazos y minimiza los índices de errores. El sistema no es infalible, pero disminuye los fallos«. La pantalla ilustraba con gráficas el crecimiento en el número de beneficiarios (332.828 personas, un 56,8% más que en 2018) y prestaciones (83,3% más que en la última etapa socialista). Todo ellos «mientras que desde 2012 a 2014 se expulsaron del sistema a 30.000 usuarios», por eso hay una mejoría 'maquillada' en las cifras, cuando «la consejera era María Jesús Montero». López avanzaba un nuevo dato con respecto al recorte en los tiempos de espera para la aprobación de la solicitud de la dependencia, que baja otra vez en noviembre hasta quedar en 512 días . «Es muy elevado, pero venimos de 1.275 días, tres años y medio de espera. Lo hemos reducido en dos años». Confía en que pronto se conseguirá el número más bajo de la historia de la comunidad en este apartado, muy probablemente a final de año, pues «desde octubre de 2024 a noviembre de 2025, la media de días ha aumentado en 16 en España, mientras que en Andalucía ha bajado en 106 días». Una reducción a la vez que se ha incluido esa tramitación preferente para los más vulnerables: niños y niñas menores de 14 años, mayores de 90 años, personas en cuidados paliativos y enfermos de ELA. En Andalucía faltan plazas residenciales, reconocía. Pero «¿de dónde venimos?», preguntaba de manera retórica. En la última legislatura del PSOE se crearon 283, en la primera legislatura de Juanma Moreno se sumaron hasta llegar a 2.168 y en esta legislatura el crecimiento llega a las 5.385. «Además, están dotadas presupuestariamente. Antes, para abrir una residencia se tardaban 2 años, y eso nos lo cargamos con el decreto de simplificación administrativa para que sea en tres meses». En cuanto a la financiación del sector, en las residencias de mayores hubo un crecimiento del 0,30% durante los últimos ocho años del PSOE y 26% con el Gobierno de Juanma Moreno. Con respecto a la discapacidad , ascensos del 1,17% (PSOE) y 32% (PP). «Además, no somos los que más pagamos, pero sí de los que mejores pagamos, pues se paga a 20 días«. En la ayuda a domicilio, se pasó de una subida de cero (de 2007 a 2018) a un 28%. No es suficiente pues Andalucía tiene el 47% de la ayuda a domicilio de toda España. La Junta ha aumentado la partida presupuestaria destinada a la dependencia, con «más inversión que nunca», pero «seguimos a pulmón. El presupuesto de dependencia de 2026 es 2.610 millones de euros, de los cuales 1.840 millones de euros los aporta la Junta (71%) y 770 el Gobierno 770 (29%). «Quiero firmar el mismo documento que la señora Montero ha firmado con el País Vasco para que nos pague la mitad, porque no queremos ser más que nadie, pero tampoco menos que nadie». Por ello, cada vez le cuesta más encajar los golpes virulentos de la oposición, especialmente de los parlamentarios socialistas. En las últimas semanas ha marcado la línea: «hasta aquí», tras haber acudido anteriormente al silencio para no responder con dureza a cuestiones tan sensibles. En el foro ABC, por vez primera ha contestado a las críticas más amargas del PSOE, que le reprueba que tantos andaluces mueran esperando esa ayuda. «La dependencia no cura. Ayuda a poder vivir con dignidad hasta los últimos días de vida», lamentaba. «Siempre han fallecido personas esperando la dependencia, y a día de hoy sigue ocurriendo. Yo pido perdón por las que fallecen ahora, y por las que fallecían antes y las que escondían en un cajón«. Y mostraba la comparativa. « En 2018, fallecieron 13.149 personas en Andalucía esperando la dependencia, el doble de las personas de este año (6.784 a 31 de noviembre). Hoy fallece la mitad de los andaluces que entonces». A su vez, «la media en España de personas que fallecen esperando la dependencia es de un 7% y en Andalucía es de un 4,3%. En Canarias, un 14% y en Cataluña es de un 13%. Eso no hace que yo duerma tranquila, pero no voy a agachar la cabeza mientras otros guardaban expedientes en los cajones». Culminaba su exposición con esta ilustración. «Cuando llegamos, teníamos un coche antiguo, usado, y decidimos cambiarlo por un auto de última generación. Se está implantando y ya se ven los resultados. Pero cuando esté óptimo, si no tengo gasolina, el coche no andará» . El nuevo modelo ha alcanzado una velocidad de crucero pero llegará un momento en que tendrá que echar el freno si no cuenta con la preceptiva financiación.