Ya han transcurrido dos semanas desde que trascendiera la denuncia contra el entonces líder del PSOE en Torremolinos, y todavía concejal y diputado provincial, Antonio Navarro, por presunto acoso sexual a una militante, y la tormenta desatada sigue emitiendo señales de forma intermitente. A medida que pasan los días y que él sigue sin entregar sus cargos institucionales tal y como le ha pedido la dirección socialista, en vísperas del primer pleno de la Diputación Provincial de Málaga al que debía acudir -tras estallar el caso- se ha conocido que Navarro está de baja médica. Y, de hecho, no tiene previsto asistir a la sesión plenaria convocada para este miércoles 17 de diciembre. Navarro le ha presentando su parte de baja a la institución provincial malagueña y también se lo ha comunicado a la propia formación socialista, de cuyo grupo de diez representantes en la Diputación sigue formando parte oficialmente.