El Banco de Sangre y Tejidos de Aragón ha lanzado su campaña de Navidad bajo el lema “Para tu amigo invisible, el mejor regalo: dona sangre”. El objetivo es hacer un llamamiento a la población para cubrir las necesidades de componentes hematológicos durante las próximas semanas, unas fechas en las que tradicionalmente se registra una alta demanda mientras las donaciones tienden a bajar. Según ha explicado la directora gerente del banco, Rosa Plantagenet, diciembre es “un mes muy complejo” porque las celebraciones y los traslados provocan un cambio en las rutinas habituales, lo que puede hacer que la donación de sangre pase a un segundo plano para muchos donantes habituales. La actividad sanitaria no se detiene durante las fiestas y es fundamental mantener las reservas. “La sanidad no para, los hospitales siguen funcionando y necesitamos sangre para las cirugías, para las intervenciones, para los accidentes… la sangre tiene que estar siempre, siempre disponible”, ha subrayado Plantagenet. La directora gerente ha recordado que la sangre es un componente vital que no se puede fabricar y que su disponibilidad depende enteramente de la generosidad de los ciudadanos. “Si no nos la donan, no se puede fabricar. Gracias a que hay donaciones de sangre, las personas pueden recibir esa transfusión”. Las transfusiones son cruciales en múltiples situaciones. Son una pieza clave en emergencias como los accidentes de tráfico, pero también en intervenciones quirúrgicas programadas, ya que “nadie entraría a un quirófano” sin la seguridad de tener sangre disponible por si surge una complicación. Además, existen pacientes que dependen de ellas de forma crónica, como los enfermos oncológicos que ven alterados sus parámetros sanguíneos por los tratamientos, o personas con problemas hematológicos que necesitan un suministro constante. Afortunadamente, la respuesta de los aragoneses suele ser muy positiva. “Somos muy generosos”, ha afirmado Plantagenet. “En cuanto les explicamos y hacemos las llamadas, la gente responde”. Gracias a esta solidaridad, Aragón es una comunidad autosuficiente en materia de hemoderivados, cubriendo las necesidades de todos los hospitales públicos y privados con sus propias donaciones. Anualmente, se registran alrededor de 85.000 donaciones, una cifra que permite no tener que solicitar ayuda a otras comunidades autónomas. Sin embargo, desde el banco de sangre insisten en la importancia de recordar periódicamente la necesidad de donar, especialmente en períodos vacacionales como la Navidad o el verano, cuando los cambios en el estilo de vida pueden afectar a la regularidad de las donaciones. Por ello, la campaña busca reactivar ese espíritu solidario y garantizar que las reservas se mantengan en niveles óptimos durante estas semanas críticas. Para facilitar la donación a todos los ciudadanos, la campaña contará con unidades móviles que recorrerán más de 70 localidades, asociaciones y empresas de las tres provincias aragonesas. Además del punto fijo en Zaragoza, habrá puntos de extracción en lugares como Ikea, Gran Casa, Jaca, Monzón, Teruel o Mas de las Matas. “Queremos que nadie en ningún sitio de la comunidad autónoma que quiera donar no pueda hacerlo”, ha destacado la directora. En esta campaña, se hace un llamamiento particular a los donantes del grupo 0 negativo, ya que sus reservas se encuentran actualmente “más justitas”. Los requisitos para donar son sencillos: pesar más de 50 kilos, gozar de buena salud y “ser valiente”, como apunta Plantagenet, recordando que “por un pinchazo tuyo, salvas una vida”. Para animar a la participación, se realizarán sorteos y se entregarán pequeños detalles, gestos que desde el banco definen como “un cariño”, porque el valor del acto de donar “no tiene precio”.