La brecha de género en el sueño: las mujeres pierden 57 noches de descanso al año: «Dormir es esencial para mantener el equilibrio mental»

Unas 400 horas de descanso perdidas al año. La brecha de género existe un muchos ámbitos, y en el sueño no iba a ser menos. Las mujeres pierden 57 noches de descanso al año , seis más que los hombres, según un estudio de la plataforma de psicología online Unobravo , que radiografía los hábitos de sueño de la población y revela cuánto descanso se pierde de forma anual. Estudios científicos revelan que las mujeres no duermen inherentemente menos que los hombres en condiciones ideales, sino que reportan peor calidad y mayor fragmentación del sueño en la vida real. Investigaciones como las de la Universidad de Loughborough (Inglaterra) y Duke (Estados Unidos) indican que necesitan unos 11-20 minutos extra por noche para compensar su mayor actividad cerebral multitarea y ritmos circadianos más cortos .​ Factores hormonales, como el ciclo menstrual, embarazo o menopausia, provocan interrupciones nocturnas, mientras que cargas familiares desiguales agravan el problema en días laborables. Aunque polisomnografías muestran sueño profundo ligeramente mayor en mujeres jóvenes, la percepción de descanso es peor debido a despertares frecuentes.​ En España se duerme menos de lo recomendable y el impacto en la salud mental es cada vez más evidente. Dormir es proceso biológico activo que repara no sólo nuestro cuerpo, sino también nuestro cerebro, por lo que es fudamental para gozar de una buena calidad de vida, y para protegernos de muchas enfermedades . «Dormir entre siete y ocho horas es esencial para mantener un buen equilibrio físico, cognitivo y emocional», según la doctora Nuria Roure, especialista en sueño . La experta explica que durante la primera mitad de la noche el cuerpo repara su parte física, mientras que en la segunda se restauran las funciones mentales y emocionales. Según una encuesta a 1.500 adultos, los españoles duermen una media de 6,7 horas diarias, por debajo de las siete a nueve horas recomendadas. Solo el 47% logra dormir más de siete horas, mientras que un 9% reconoce que no llega a cinco horas por noche. Por edades, los jóvenes de 18 a 24 años duermen 6,8 horas, los adultos de 55 a 64 años bajan a 6,6, y los mayores de 65 repuntan hasta las 7 horas de sueño diario. La falta de sueño tiene un claro reflejo en el bienestar emocional: el 75% asegura que dormir bien mejora su estado de ánimo y el 72% afirma que le ayuda a gestionar mejor sus emociones. El estrés y las preocupaciones son el principal enemigo del descanso , citados por la mitad de los encuestados, junto a factores como las cenas copiosas, el ruido, los cambios de temperatura, la cafeína, la televisión nocturna y el uso del móvil en la cama. De media, los adultos pierden 412 minutos de sueño cada semana por despertares , insomnio, ronquidos o sueño inquieto, el equivalente a 357 horas anuales o 51 noches completas. La brecha de género es significativa: las mujeres pierden unas 400 horas de sueño al año (57 noches), frente a las 313 horas (45 noches) de los hombres, especialmente por mayor impacto del estrés y de los ronquidos de la pareja. «Descansar bien es clave para un corazón sano. Y cuando hablamos de sueño, no solo importa la cantidad, sino la calidad. Un descanso reparador regula tu presión arterial, tu ritmo cardiaco y tus hormonas, fundamentales para un corazón sano. Y probablemente por eso, las personas con un descanso inadecuado tienen un mayor riesgo de eventos cardiovasculares», explica el doctor José Abellán . «Una buena higiene del sueño es esencial para mantener el equilibrio mental y emocional. La forma en que nos preparamos para descansar, desde nuestras rutinas hasta el entorno, influye directamente en la profundidad del sueño y en cómo nos sentimos al día siguiente», indica el psicólogo sanitario Francisco Rivera Rufete , Gerente Clínico del servicio de psicología onlineUnobravo, que ahonda en que «dormir mal puede afectar significativamente al estado de ánimo, la concentración e incluso a la gestión del estrés; con pequeños y conscientes cambios en nuestros hábitos, podemos favorecer que mente y cuerpo se recuperen y restauren de forma natural». El informe de Unobravo ha revelado que casi la mitad de los españoles (46 %) tiene pesadillas o sueños vívidos al menos una vez por semana . Entre los temas más recurrentes se encuentran la sensación de caída (25 %), situaciones de persecución o ataque (23 %), pérdidas o separaciones (17 %), sensación de estar atrapado (18 %) y la caída de dientes (15 %).