El Cabildo Catedralicio ha presentado la primera fase de un ambicioso proyecto para instalar un sistema automático de protección contra incendios de última generación en la Mezquita-Catedral de Córdoba. Esta actuación, con un presupuesto de 1.320.596 euros financiados íntegramente por la institución, fue aprobada el pasado 21 de febrero, antes del incendio registrado en agosto, y busca garantizar la conservación del monumento para las generaciones futuras. La intervención, calificada como un proyecto pionero, se centra en una innovadora combinación tecnológica. Se instalarán cámaras termográficas y un sistema de medición de temperatura por fibra óptica para la detección precoz de cualquier anomalía, que activaría un sistema de extinción mediante agua nebulizada de alta presión. Este enfoque permite una respuesta rápida y eficaz, minimizando el posible impacto sobre el edificio y reduciendo el riesgo de falsas alarmas. El sistema ha sido desarrollado por las compañías Chubb Iberia y Marioff, y su tecnología ya ha sido probada con éxito en la reconstrucción de la catedral de Notre Dame de París. Para conocer de primera mano su funcionamiento, una delegación del Cabildo y los bomberos de Córdoba se desplazaron recientemente a la capital francesa, aplicando así experiencias internacionales contrastadas y adaptadas al monumento cordobés. Alfonso Pomeda, director general de Marioff España, ha explicado que la clave del sistema es su capacidad para atacar el fuego de forma más eficiente. A diferencia de un rociador convencional, esta tecnología divide cada gota en 1.700 gotas más pequeñas que, al pasar a estado gaseoso, enfrían el entorno y desplazan el oxígeno. La compañía, con 40 años de experiencia, protege infraestructuras críticas como cruceros o centros de datos, y otros monumentos como la catedral de San Patricio de Nueva York o la Basílica de San Marcos de Venecia, bajo su lema: "Protegemos lo que más importa". El equipo de conservación del monumento ha señalado que, si bien las cubiertas bajas son accesibles para los bomberos, las cúpulas del coro y el crucero, a 40 metros de altura, suponen un desafío por el tiempo que se tardaría en llegar. Un miembro del equipo ha subrayado que se ha aprendido que "la rapidez de la intervención, esto es clave", lo que justifica la necesidad de un sistema automático en esta zona tan delicada. Esta preocupación por la seguridad no es nueva y forma parte de una "tradición muy antigua" del Cabildo, que se remonta a la instalación de los primeros pararrayos por el arquitecto Velázquez Bosco hacia 1910. La primera fase del nuevo proyecto se centrará en proteger las cinco cúpulas que conforman el coro y el crucero del edificio, consideradas el área más vulnerable por su altura y la complejidad de sus entramados de madera. Aunque la fase inicial se concentra en el área del crucero, el proyecto ha sido concebido para ser totalmente escalable. El sistema de bombeo y la central de incendios que se instalarán estarán dimensionados desde el principio para dar cobertura a la totalidad del edificio. El Cabildo ha decidido que el sistema de nebulización se extenderá progresivamente al resto de las naves, siendo la cubierta de la nave gótica la siguiente en ser intervenida. Para la implementación, el equipo de conservación ha adaptado el proyecto tecnológico a la estructura del monumento, garantizando un impacto visual y arqueológico mínimo. Se habilitarán dos acometidas de agua independientes desde la Puerta del Caño Gordo y la Puerta de Santa Catalina para asegurar el suministro, y se instalará un anillo perimetral de tuberías. Los trabajos previos de arqueología, dirigidos por Raimundo Ortiz, han confirmado que las conducciones no afectarán a restos de valor. Las obras comenzarán de forma inmediata una vez se reciban los permisos de la Delegación de Cultura de la Junta de Andalucía, cuyo proyecto ya ha sido presentado. Aunque no se han fijado plazos concretos por tratarse de una obra "muy delicada y sujeta a imprevistos", los responsables estiman que la primera fase podría completarse en "cuestión de pocos meses".