Calahorra estrena su estación del siglo XXI mientras reclama más trenes y frecuencias: las comparaciones son odiosas y el ejemplo está en Tudela

Esta semana ha comenzado a operar la nueva estación intermodal de Calahorra, una infraestructura que sustituye a la antigua y que promete transformar la movilidad en la ciudad. El primer autobús partió de sus dársenas cubriendo la línea Calahorra-Logroño, bajo la gestión de la empresa concesionaria Jiménez Movilidad. El antiguo recinto, que se había vuelto poco operativo, se destinará ahora a aparcamiento público. La alcaldesa de la ciudad, Mónica Arceiz, ha asegurado que la nueva estación ofrece una imagen acorde con la Calahorra actual: "una ciudad dinámica, pujante, activa". Según Arceiz, la infraestructura anterior desmerecía la realidad de la ciudad. "La visión que tiene ahora quien se acerca a nuestra ciudad es una ciudad moderna que conecta dos modos de transporte diferentes, como es el tren y el autobús", ha afirmado. Cuando esté a pleno rendimiento, la intermodal será "un punto importante neurálgico en Calahorra". Además de los servicios de transporte, contará con una sala multiusos para más de 300 personas y un bar-cafetería, lo que, según la alcaldesa, dinamizará no solo el entorno, sino toda la ciudad al poder acoger nuevos eventos. La acogida entre los ciudadanos en sus primeros días ha sido muy positiva. La alcaldesa ha explicado que tuvo la ocasión de hablar con los primeros usuarios y "estaban encantados". Una usuaria habitual del tren le comentó que la nueva afluencia de viajeros en la zona le dará más seguridad al volver a casa por la noche. Pese a la modernización de la infraestructura, la alcaldesa ha manifestado su descontento por la falta de servicios ferroviarios. Arceiz aprovechó la inauguración para pedir a la delegada del Gobierno "que se pusiera del lado de los calagurritanos y de los riojanos" y ayudara a conseguir más frecuencias. "Estamos mucho peor que hace tres años", sentenció. Arceiz ha comparado la situación de Calahorra, con un solo tren directo a Madrid, con la de localidades cercanas como Tudela, que tiene "10 trenes o 12 trenes al día". La alcaldesa ha calificado las comunicaciones como "fundamentales para la economía, el turismo y la cultura", y ha criticado la falta de trenes para usar los bonos de transporte. "No nos merecemos lo que nos está pasando", ha lamentado. La nueva estación ha supuesto una inversión total superior a los 4,3 millones de euros. La financiación ha sido compartida entre el Gobierno de España (981.000 euros), el Gobierno de La Rioja (1.350.000 euros) y el Ayuntamiento de Calahorra, que ha aportado más de 1,9 millones. Arceiz ha destacado que el esfuerzo fue "descomunal", ya que la rehabilitación de las naves existentes fue más compleja de lo previsto y retrasó la apertura. Aunque ya está operativa, aún quedan detalles por finalizar. Próximamente se pondrán en marcha los cargadores públicos para vehículos eléctricos y la zona de aparca bicis. La alcaldesa también ha reconocido que los primeros días han sido "un poco caóticos", especialmente con el transporte escolar, pero la situación ya se está normalizando para dar servicio a los 149.000 pasajeros anuales previstos. La gestión de la cafetería-restaurante correrá a cargo de la empresa concesionaria, que ya está en contacto con empresas interesadas. Por otro lado, la alcaldesa ha señalado otro recorte en los servicios públicos, en este caso de Renfe, que ha reducido el horario de atención en taquilla a solo cuatro horas por la tarde, limitando el servicio a los usuarios.