El Estado mexicano acepta la condena de la Corte IDH por la muerte en 2007 de una mujer indígena náhuatl de 73 años

La sentencia responsabiliza a México por no haber proporcionado atención médica urgente a Ernestina Ascencio, víctima de una agresión sexual a manos de militares, y no haber garantizado el acceso a la justicia de sus hijos