La celebración de la Saturnalia en la antigua Roma presentaba notables diferencias con las actuales festividades navideñas, aunque compartía algunos elementos que han perdurado con el paso de los siglos. Mientras que hoy la Navidad tiene un marcado carácter religioso y familiar, la Saturnalia era una fiesta pagana dedicada al dios Saturno, vinculada al ciclo agrícola, la abundancia y el final del año. Durante esos días se suspendían las jerarquías sociales, los esclavos podían comportarse como hombres libres y se promovía un ambiente de igualdad, licencias y diversión colectiva, algo que no se reproduce en la sociedad contemporánea.