La Navidad es una época de regalos, pero también de decisiones impulsivas que pueden tener graves consecuencias. Por ello, el Colegio de Veterinarios de Toledo insiste en que una mascota no es un juguete y pide reflexionar antes de regalar un animal. Luis Rodríguez, responsable del área de animales de compañía de la institución, advierte de que la falta de meditación sobre esta decisión puede derivar en problemas de comportamiento, abandono e incluso maltrato. Según Rodríguez, cuando la decisión de incorporar un animal al hogar no se valora adecuadamente, “los problemas van a aparecer muy pronto”. Explica que estas situaciones no solo perjudican al animal, sino que también “van a generar problemas de convivencia y de salud pública”. Por ello, insiste: “una mascota no es un objeto ni un regalo, sino que es un ser vivo que va a requerir un compromiso estable y responsable durante toda su vida”. Los profesionales veterinarios juegan un papel crucial no solo en el cuidado de la salud del animal, sino también como asesores. Desde el Colegio de Veterinarios de Toledo señalan que pueden orientar de forma objetiva sobre qué tipo de animal es el más adecuado para cada familia e incluso desaconsejar su adquisición si no se dan las condiciones. Esta orientación inicial es “básica para garantizar el bienestar del animal y evitar problemas que puedan surgir en el futuro”. Una vez el animal llega al hogar, las primeras semanas son fundamentales. Durante este periodo, el veterinario establece un plan sanitario adecuado, revisa su estado de salud y planifica las vacunaciones y desparasitaciones necesarias, resolviendo además las dudas de los nuevos propietarios. La importancia de la labor veterinaria se enmarca en el enfoque ‘One Health’ (una sola salud), que recuerda que la salud de los animales, las personas y el entorno está interconectada. Rodríguez subraya un dato clave: “más del 60 % de las enfermedades que afectan a las personas tienen su origen en los animales”. Por tanto, prevenirlas en las mascotas es una forma de proteger a toda la sociedad. Cuando se ejerce una tenencia responsable con un seguimiento veterinario y medidas preventivas, se reducen los riesgos sanitarios y se protege la salud pública. En definitiva, el trabajo del veterinario “no solo beneficia al animal, sino que beneficia también al conjunto de la sociedad”, afirma el experto. Ante el aumento del interés por las mascotas en estas fechas, los expertos recomiendan reflexionar con calma y pensar a largo plazo. Es fundamental informarse, consultar siempre con el veterinario y asegurarse de que todos los miembros del hogar están de acuerdo y preparados para asumir la responsabilidad, que implica dedicación diaria y recursos económicos. Finalmente, desde el Colegio de Veterinarios de Toledo recuerdan que los cuidados no se limitan a cuando el animal enferma, ya que la prevención es fundamental durante toda su vida. Como concluye Rodríguez, “la mejor forma de querer un animal es asumir una tenencia responsable desde el primer momento que entra en nuestras casas”.