El sector primario de Navarra cuenta con 36 nuevos jóvenes preparados para su primera instalación profesional tras completar una formación intensiva durante los últimos cuatro meses. Estos certificados les permitirán acceder a la convocatoria de ayudas de 2025 para el establecimiento de jóvenes y nuevos agricultores del Gobierno de Navarra. Una de estas futuras profesionales es Leire Echevarría, quien se instalará con su marido en una explotación de ganadería ovina en Lizárraga. Aunque nació en un caserío guipuzcoano, Leire Echebarria estudió magisterio. Su vida cambió hace ocho años al conocer a su marido, que por entonces compaginaba su trabajo en una fábrica con un pequeño rebaño de ovejas lachas. "Nuestra primera cita acabó recogiendo un carnero que se le había escapado", recuerda. Poco a poco, el rebaño fue creciendo, y tras un despido durante la pandemia, su marido decidió dedicarse por completo a la ganadería, que hoy cuenta con unas 460 cabezas. Leire, residente actualmente en Lizarraga, ha destacado la importancia del curso de cuatro meses impartido por INTIA, que le ha servido para "hacerme una idea de lo que quiero en mi explotación". Además del conocimiento técnico, valora la creación de "un grupo de compañeros con la misma locura", con quienes comparte experiencias y problemas similares, ya sea en la Ribera Alta o en el Baztán. La formación ha cubierto áreas que ella no había considerado, como primeros auxilios, permisos ambientales o la gestión técnico-económica. "Nos han explicado cosas que yo no tenía ni idea", admite. Para ella, este aprendizaje es fundamental porque el modelo de subsistencia de hace décadas ya no es viable. Esa es la clave que Leire subraya: "La ganadería y agricultura de hace 50 años ya se ha acabado. Hoy en día tienes que ser profesional". En este sentido, agradece que los ponentes del curso les hayan dirigido hacia esa nueva mentalidad empresarial, indispensable para la supervivencia del sector. La ganadera también aborda uno de los grandes desafíos del campo: el relevo generacional. Señala que no solo es importante el relevo intrafamiliar, ya que "muchos hijos de ganaderos pasan del tema porque han visto lo que es trabajar 24 horas al día", sino también el relevo extrafamiliar. Hay muchos propietarios sin herederos que no quieren que su explotación se pierda, e INTIA facilita el contacto con jóvenes interesados en tomar el testigo. Con la vista puesta en el futuro, Leire y su marido están diseñando un proyecto que incluye la venta directa de sus productos y la transición al sistema ecológico con el asesoramiento de CPAEN. Además, tienen un plan claro para diversificar: "En el 2027, cuando acabemos la obra que tenemos pendiente, quiero empezar a organizar visitas guiadas en mi explotación". Finalmente, Leire Echebarria lanza un mensaje de ánimo a quienes se plantean dedicarse al campo. "Es un sector que necesita de jóvenes, de jóvenes formados y de no formados también", afirma, y recalca que estas personas necesitan "apoyo social y político". Porque, como concluye, "del campo vivimos todos y hay que dar valor a los productos de calidad que tenemos aquí cerca".