Un psicólogo advierte sobre los peligros de regalar en exceso en Navidad

La Navidad llega acompañada de un notable aumento del consumo y las compras. Ante este escenario, el psicólogo y biólogo Alfonso Echávarri ha analizado los riesgos de esta tendencia, poniendo el foco en la diferencia entre las compras excesivas, habituales en estas fechas, y las compulsivas, que revisten una mayor gravedad. Echavarri aclara que no se debe confundir la compra excesiva con la compra compulsiva. La primera se define como un "descontrol puntual" que se detiene tras las fiestas, mientras que la segunda "ya es otra cosa", al tener una entidad clínica y requerir ayuda profesional. La compra compulsiva surge de "la necesidad de calmar algo que es difícil de gestionar". Según el psicólogo, la persona experimenta un pico de ansiedad que le impulsa a comprar sin planificación. Aunque siente un breve alivio tras la compra, "enseguida aparece la culpa", lo que vuelve a aumentar la ansiedad y reinicia el ciclo. Uno de los mayores peligros de este consumo desmedido afecta a los más pequeños. Echavarri advierte sobre el "síndrome del niño hiperregalado", un término que describe los "efectos psicológicos negativos que se producen en los niños debido al exceso de regalos". A menudo, la causa de este exceso de regalos reside en los propios adultos, que los utilizan "para compensar la falta de tiempo o la dedicación a los hijos". El psicólogo califica esta práctica de "mala estrategia", ya que se enseña a los niños que "se es en función de lo que se tiene". Este fenómeno provoca en los menores sobreestimulación, egoísmo, una baja tolerancia a la frustración y dificultades de atención y concentración, lo que a su vez puede generar inseguridad. Además, les impide valorar lo que realmente tienen. Para evitar estos problemas, el experto recomienda dar un sentido profundo al acto de regalar. "No es tan importante el contenido, sino todo lo que rodea al contenido", afirma. La clave es el tiempo invertido en pensar en la otra persona, porque, como señala, "quien dedica parte de su tiempo pensando en el regalo de otra persona, está dedicando parte de su vida". En segundo lugar, es fundamental "marcarte un presupuesto y no te salgas de ahí", lo que exige una planificación previa. Echavarri alerta contra la "barbaridad" de solicitar créditos personales para afrontar los gastos navideños, ya que pueden llevar a "empezar el año realmente mal". Finalmente, en cuanto a los regalos para niños, la recomendación es optar por aquellos que fomenten el juego colectivo y puedan ser compartidos. Juguetes como un balón o los juegos de mesa son preferibles a los que aíslan al niño, pues ayudan a desarrollar habilidades sociales y a aprender a compartir.