Los tres concejales de Vox en Inca votaron en contra de una declaración del Ajuntament que condenaba el terrorismo de ETA y abandonaron el pleno tras la votación. El partido de ultraderecha había presentado previamente una moción en la que solicitaba la colocación de una placa en memoria de las víctimas de ETA y el regidor socialista Andreu Caballero propuso una enmienda a esa moción para sustituirla por un acuerdo de pleno, recordando que ya existe una comisión de memoria democrática como herramienta «de reconocimiento y sin partidismos».