Se despide del Mallorca uno de los jugadores que han marcado este último ciclo histórico de la entidad, con dos ascensos a Primera, también un descenso, y una final de la Copa del Rey. Dani Rodríguez ha dicho adiós este jueves 18 de Diciembre al Mallorca tras haber llegado a un acuerdo para la rescisión de contrato que finalizaba en Junio. Se había ganado este año contractual tras los partidos disputados la pasada temporada y a sus 37 años se mantiene una gran forma, ahora sin partidos en sus piernas tras dejar de contar para el entrenador. Todo ello tras el caso de indisciplina por el que fue sancionado, al criticar públicamente a Jagoba Arrasate. Desde Septiembre el jugador había dejado de contar tras sus críticas, lo que le costó una dura sanción interna, la reprobación de la afición y que dejara de contar deportivamente para el técnico. Siendo capitán del equipo además, triste epílogo a una etapa histórica del club y también la más importante de su carrera. El centrocampista gallego, conocido como el Tigre de Betanzos, se despide del club tras disputar 282 partidos, en los que anotó 32 goles y repartió 39 asistencias, cifras que le sitúan entre “los grandes referentes en la historia moderna del club”, según ha señalado el Mallorca en un comunicado. Ciclo histórico.- Dani Rodríguez llegaba en 2018 procedente del Albacete y con el Mallorca alcanzaba el sueño de jugar en Primera División, ha sido su etapa más longeva y donde ha sido más importante. Ha jugado en Primera y en Segunda división, marcaba el primer gol del regreso a Primera en 2019, marcaba el único gol en la final que cerca estuvo de darle una segunda Copa del Rey al Mallorca, en 2024 ante el Athletic. Es historia bermellona, una historia con un epílogo desafortunado, que le ha privado de salir por la puerta grande pero que en todo caso no empaña su prolija etapa en el club. Forma parte de ese ciclo del que tan solo quedan ya Raíllo, Valjent y Abdón. Precisamente Dani fue un referente para Valjent, el extranjero ya con más partidos como mallorquinista, fue quien más le apoyó en momentos complicados y es obvio que el de Betanzos tenía ascendencia en el vestuario. Sus decisiones equivocadas con sus críticas públicas hicieron daño al entrenador y al equipo, pero sobre todo le han dañado a sí mismo. En un vídeo institucional con el club, Dani sólo tiene palabras de agradecimiento. El club ha procurado que la salida sea lo más formal posible y evitado declaraciones del jugador, firmando una cláusula de confidencialidad con Dani. "La única palabra que se repite es gracias. Sólo puedo dar gracias porque su cariño me ha llegado desde el primer hasta el último día. Espero haber devuelto ese cariño con trabajo, sacrificio y valorando cada día que me ponía esta camiseta”. Su futuro puede estar en Primera o Segunda, se verá, es una oportunidad de mercado en este momento. Del Deportivo por ahora no hay nada a pesar de lo que se ha llegado a decir.