El Parque Nacional de Doñana ve en serio riesgo la permanencia de su humedal. Así lo asegura un estudio de la Universidad de Sevilla , que apunta a que la marisma de este enclave único desparecerá dentro de 61 años . Dicho estudio incluso contempla un escenario más pesimista, cifrado en 45 años , según la evolución de las condiciones de temperatura y precipitaciones que se registren; y uno más optimista, estimado en unos 175 años . El estudio ha logrado desarrollar un algoritmo innovador que permite detectar con alta precisión la presencia de agua superficial a partir de imágenes del satélite Sentinel-2. El trabajo, desarrollado en el marco del proyecto Aplicación del tratamiento digital de imágenes para el monitoreo de recursos hídricos en línea con la Agenda 2030, ha sido liderado por Emilio Ramírez Juidias , investigador del Departamento de Ingeniería Gráfica, y las estudiantes Clara Isabel González López y Paula Romero Beltrán , adscritas al programa de Altas Capacidades Intelectuales. Los datos de que dispone la investigación se remontan a 2005 y señalan que desde esta fecha y hasta 2024 se ha perdido en torno a un 15% de la superficie húmeda media (29.824 km2), de volumen de agua (11.680 hm3) y profundidad (0,023 metros). No obstante, llama la atención que de ese 15%, el grueso (más de un 13%) se ha perdido a partir de 2010 , «cuando se registra un aumento de las temperaturas y sobre todo un descenso acuciante en las precipitaciones, ayudado por la extracción ilegal de los recursos hídricos en la zona», asegura el Ramírez Juidias. El proyecto tiene como objetivo crear una herramienta tecnológica avanzada para el seguimiento del estado hídrico en entornos naturales vulnerables, alineada con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, especialmente el ODS 6 y el ODS 13. La investigación se basa en el uso de teledetección y tratamiento digital de imágenes satelitales como respuesta a la escasez de agua y al deterioro ecológico provocado por el cambio climático y la actividad humana. El algoritmo, desarrollado por alumnas bajo la dirección del profesor Ramírez Juidias, emplea técnicas de machine learning aplicadas a datos del satélite Sentinel-2 . A partir de una fórmula adaptada a zonas húmedas como Doñana, permite diferenciar con precisión entre masas de agua y vegetación , generando mapas actualizados sobre la evolución del agua superficial. Los resultados han sido validados sobre el terreno, mostrando una alta fiabilidad predictiva. El estudio plantea estrategias para frenar la pérdida de las marismas, como el cierre de pozos ilegales , la transición hacia una agricultura más sostenible , la restauración de humedales y la reutilización de aguas depuradas . Además, destaca la aplicabilidad de esta tecnología a otros ecosistemas y subraya el valor del talento joven y la innovación científica en la gestión sostenible del agua y la lucha contra el cambio climático.