El año 2025 será el último en el que el muelle de La Cabezuela-Puerto Real no tendrá conexión por tren. Así lo ha confirmado la presidenta de la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz (APBC), Teófila Martínez, quien ha calificado este avance como un hito muy esperado. "El año 2025 va a ser el último año después de 25 años de espera que Cabezuela no va a tener tren", ha declarado Martínez, poniendo fin a un largo período de incertidumbre que se remonta a la primera licitación fallida del año 2009. Esta infraestructura, ha subrayado, es fundamental para el relanzamiento de la actividad de graneles. A pesar de los retrasos y las dificultades, 2025 ha sido un año de "avances deseados, trabajados, y no por ello menos importantes". La presidenta de la APBC ha explicado que la consolidación del crecimiento en el movimiento de mercancías, la mejora de infraestructuras estratégicas y un impulso firme a la sostenibilidad han marcado el ejercicio. Sin embargo, ha confesado sentir la "losa encima de la necesidad de avanzar más deprisa", una presión constante derivada del inconformismo y el deseo de materializar los proyectos cuanto antes. La ejecución de la nueva terminal de contenedores se encuentra ya al 87%, lo que garantiza su finalización durante el año 2026. Junto a ella, el túnel de acceso, que sufrió un "fiasco importante" tras su inundación, también encara su fase final. Martínez ha detallado la complejidad de los trabajos de reparación de una obra que pasó de un presupuesto de 19,5 millones de euros en 2014 a una cifra que superará los 60 millones de euros. Ambas infraestructuras son consideradas "esenciales para el tráfico portuario". Este esfuerzo inversor ha permitido que, a falta de los datos de diciembre, el puerto vaya a cerrar el año como el sexto con mejores resultados de su serie histórica desde 1908. Mientras el sistema portuario español ha decrecido en movimiento de mercancías, la dársena gaditana ha crecido, recuperándose del bache del año anterior. Martínez ha recordado que el límite histórico de 5,5 millones de toneladas se debía a la falta de infraestructuras como la nueva terminal o el tren, una barrera que se superará a partir de 2026. Uno de los hitos en la relación con el entorno ha sido el inicio de las obras de urbanización del Muelle Ciudad, la parte "más visible" del proyecto de integración. En paralelo, se ha avanzado en la tramitación de concesiones clave para dinamizar la zona, como el nuevo hotel de Puerto América, la zona de ocio en el muelle Reina Sofía, la tercera terminal de pasajeros y, de forma destacada, un aparcamiento en altura. Martínez ha calificado el aparcamiento como la "pieza fundamental" del proyecto de integración, ya que permitirá absorber al menos 1.000 de las 1.500 plazas que actualmente se encuentran en superficie. "De eso va a depender que aquellas actividades económicas que se vayan a instalar sepan que tienen un aparcamiento, que ese problema no lo van a tener", ha afirmado, defendiendo la necesidad de adelantar las tramitaciones para no perder tiempo una vez se trasladen los contenedores. En el ámbito de la sostenibilidad, el proyecto insignia es la conexión eléctrica para cruceros (OPS), desarrollada junto a Endesa. Aunque el proceso ha sido complejo por ser una iniciativa pionera, la presidenta ha garantizado que "ya está todo listo para poder enchufar", a falta de unas últimas pruebas con barcos. Además, ha reiterado la reclamación al Estado para que dote a los puertos de suficiente energía en alta tensión para cumplir con la directiva europea de electrificación de muelles en 2030. Finalmente, la presidenta ha destacado el creciente interés que despierta el puerto a medida que las inversiones se materializan. La estratégica posición en el Estrecho de Gibraltar, en un contexto de gran dinamismo en el Mediterráneo y Marruecos, augura un papel clave para la dársena gaditana. "El puerto de la Bahía de Cádiz va a ser en el futuro un punto importantísimo de la logística, no solamente de Andalucía y de España, sino de Europa", ha sentenciado. Para concluir, Teófila Martínez ha puesto en valor la actividad portuaria como el principal agente económico de la bahía, recordando que el último estudio de impacto de 2017 estimaba la creación de 11.000 puestos de trabajo. Un nuevo concurso actualizará estas cifras para reflejar el crecimiento hasta 2026. Como deseo para el nuevo año, ha pedido a los "reyes magos" que se desbloqueen los suelos de Trocadero y Lógica, donde esperan "una media de siete u ocho empresas" para invertir.