A principios de esta semana Ilia Topuria (28 años) publicó un comunicado en el que aseguraba haber sufrido «presiones intolerables» e «infundadas acusaciones de malos tratos». «En las últimas semanas sabéis que he tenido que renunciar temporalmente a defender mi título, algo que, como imaginaréis, no ha sido una decisión fácil. Pero cuanto la vida te pone ante una situaciones que amenazan tu paz, tu familia y tu nombre, llega un momento en el que hay que dar un paso al frente», comenzó diciendo el doble campeón mundial de la UFC en su nota trasladada a los medios. «Durante los últimos meses he sufrido situaciones y presiones intolerables, amenazando con difundir infundadas acusaciones de malos tratos que solo desaparecerían a cambio de dinero, pero la verdad solo tiene un camino: los hechos», continuó diciendo. En un texto contundente, el luchador hispanogeorgiano afirmó que había sufrido un intento de extorsión. «Todos ellos están perfectamente documentados -audios, mensajes, testimonios y vídeos- y están siendo puestos a disposición judicial para proceder legalmente no solo por intento de extorsión, sino también por falsificación de pruebas, sustracción de dinero y objetos personales, además de por todas las amenazas recibidas», apuntó. «He intentado mantener silencio para proteger a mis hijos , que son los pilares de mi vida, pero he entendido que callar ya no es proteger : es permitir que la mentira siga creciendo», añadió. «Quienes me conocen saben que jamás he ejercido la violencia contra nadie y que mis valores siempre han sido los del respeto, la disciplina y la honestidad», sentencia. Ahora su esposa, Giorgina Uzcategui , ha roto su silencio a través de sus abogados, quienes han enviado un comunicado a 'LOC' para pronunciarse sobre «la proliferación de informaciones, especulaciones públicas y afirmaciones de carácter difamatorio que están circulando en distintos medios». En él, la joven asegura que «en la actualidad existe un procedimiento judicial en curso que afecta de manera directa a una menor de edad» y advierte que este tema será tratado exclusivamente de forma «privada y familiar», motivo por el que «ha optado expresamente por no realizar manifestaciones públicas y por canalizar esta situación desde el máximo respeto al procedimiento y de las personas implicadas». Habrá que esperar para ver si el luchador responde a estas declaraciones u opta por guardar silencio y dejar que la justicia actúe.