Las malas palabras pueden hacerte más fuerte

Las groserías y las malas palabras pueden mejorar el rendimiento físico de las personas, al ayudarlas a superar sus inhibiciones y esforzarse más en pruebas de fuerza y resistencia, según una reciente investigación. No se trata de usarlas habitualmente, sino de tenerlas en cuenta cuando necesitamos una "descarga" emocional, y sin agredir a otras personas.