Parece que el culebrón por el puesto de jefe de la NASA ha llegado a su fin. Al menos, de momento. Porque el Senado de Estados Unidos acaba de ratificar al millonario y astronauta civil Jared Isaacman como nuevo administrador de la agencia espacial estadounidense tras una votación de 67 a 30. Isaacman es un defensor de las misiones a Marte y tiene una buena relación con Elon Musk, fundador de SpaceX, empresa con la que ha viajado al espacio en varias ocasiones e incluso protagonizado la primera caminata civil. De hecho, parece ser que su relación con Musk fue uno de los motivos por los que el presidente de EE.UU. Donald Trump, quien había propuesto a Isaacman con anterioridad para el puesto, cambiara de idea antes de su ratificación por el Senado tras el enfriamiento de las relaciones con el dueño de SpaceX. No obstante, la versión oficial señaló que la decisión se tomó por los vínculos del millonario con el partido demócrata, a quien habría financiado en anteriores elecciones. «Tras una revisión exhaustiva de mis asociaciones previas, retiro la nominación de Jared Isaacman para dirigir la NASA. Pronto anunciaré un nuevo candidato que estará alineado con la misión y priorizará a Estados Unidos en el espacio. ¡Gracias por su atención!», escribió el pasado mes de mayo el presidente de EE.UU. en un escueto comunicado en su plataforma de redes sociales, Truth Social. Poco después Trump nombró como administrador interino de la NASA a Sean Duffy, el también secretario de Transportes que, poco a poco, fue haciendo acopio de poder. Duffy llegó incluso a amenazar con que la agencia espacial estadounidense abriría el contrato que SpaceX había ganado para las primeras misiones del Programa Artemis a otras empresas por el retraso del megacohete Starship. Ahora, con Isaacman como jefe de la NASA, la situación parece volverse más de cara para Musk. Isaacman, que liderará un equipo de 14.000 personas, quiere enfocarse en enviar misiones a Marte, además de impulsar el Artemis, el programa con el que la NASA quiere volver a llevar astronautas a la Luna para crear los primeros asentamientos humanos. Su intención es aumentar la participación de empresas privadas como SpaceX para ahorrar dinero y fomentar la competencia en el sector privado. De los 67 votos a favor de Isaacman, 16 fueron de demócratas y 51 de republicanos. Los 30 votos en contra fueron todos de demócratas. Algunos senadores demócratas están preocupados por la cercanía de Isaacman con Musk, cuya empresa tiene contratos millonarios con la NASA, lo que podría beneficiarse de ciertas políticas que Isaacman apoya. Isaacman también es visto como alguien que quiere acelerar la carrera lunar contra China, que planea enviar astronautas a la Luna para 2030. La NASA tiene como objetivo llegar en 2028 con el cohete Space Launch System y el cohete Starship de SpaceX como módulo de aterrizaje.