Mientras Estados Unidos flexibiliza su política federal sobre la marihuana, en México el debate sobre su regulación está detenido, pese a que hace cuatro años la Suprema Corte de Justicia de la Nación invalidó su prohibición. Durante décadas, Washington fue el principal impulsor internacional del prohibicionismo que el gobierno mexicano adoptó y sostuvo, por lo que ahora se abre una nueva oportunidad para la regulación en el país.Este jueves, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó un decreto para reclasificar la marihuana a nivel federal y sacarla del grupo de sustancias consideradas “peligrosas”, donde se ubicaba junto a la heroína, el MDMA o el LSD, para colocarla en la misma categoría que medicamentos como la codeína, la ketamina y ciertos esteroides. La decisión no legaliza la marihuana recreativa a nivel federal, pero acelera la investigación científica y médica de la planta, que ya es legal en varios estados de Estados Unidos. En México, la regulación del consumo lúdico de la marihuana no ha estado en la agenda federal. En agosto pasado, Sheinbaum llamó a abrir una discusión amplia al respecto, pero a la fecha no se ha dado ese debate y tampoco está a discusión en el Congreso. Ese día, advirtió sobre los riesgos asociados a posibles zonas de tolerancia para el consumo, como el narcomenudeo. También señaló que existen estudios que documentan afectaciones a la salud, particularmente en personas jóvenes.Presión de EU impide avance en MéxicoAdriana Muro, directora de Elementa DDHH, una organización con sede en Colombia y México, especializada en políticas de drogas, explica que justamente ha sido la presión de Estados Unidos lo que ha impedido que avance el tema en nuestro país.“Para mi desde el gobierno de Claudia Sheinbaum están siendo más cautos con implementar alguna política relacionada con la regulación de sustancias psicoactivas”, opina la abogada, quien advierte que la falta de regulación trae consecuencias, como que el cannabis no sea de la más alta calidad. “También la posesión simple de sustancias sigue en el Código Penal, es decir, si yo traigo más de 5 gramos de cannabis en la calle y un policía me detiene, se me puede llevar al Ministerio Público, se me puede procesar e incluso llevar a prisión”.El estancamiento del debate en México ocurre pese a que la Suprema Corte declaró inconstitucional la prohibición del consumo lúdico de la marihuana en 2021. Con ello, otorgó a la Secretaría de Salud, a través de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), la facultad de autorizar a personas adultas el cultivo, cosecha, preparación y traslado de cannabis para fines personales, para lo que se necesita tramitar un permiso. Además, exhortó al Congreso de la Unión a legislar sobre el uso responsable y regulado del cannabis.Iniciativas congeladas en el Poder LegislativoA pesar de ello, el marco legal no se ha concretado. Múltiples iniciativas se han quedado congeladas en el Poder Legislativo. En 2020, el Senado aprobó la Ley Federal para la Regulación del Cannabis, que planteó regular toda la cadena productiva, crear un órgano regulador especializado, elevar a 28 gramos la portación y conservar sanciones administrativas y penales para cantidades mayores. La minuta pasó a la Cámara de Diputados, pero fue modificada, por lo que regresó al Senado en abril de 2021 y ya no volvió a ser discutida de cara a las elecciones intermedias de junio de ese año. Desde 2017, México tiene un esquema para el uso medicinal y la investigación científica. Ese año se reformaron la Ley General de Salud y el Código Penal Federal para reconocer el valor terapéutico de la cannabis y permitir su investigación, producción y distribución con fines médicos. En tanto, el tema ha seguido teniendo avances en el Máximo Tribunal del país. En mayo de 2022, al resolver un amparo promovido por una persona que fue vinculada a proceso penal, la Primera Sala de la SCJN dio otro pasito más al declarar inconstitucional la penalización de la posesión de más de 5 gramos de marihuana cuando se trata de uso personal.Desde septiembre de 2018 a la fecha, se han presentado más de 30 iniciativas relacionadas con la regulación del uso lúdico o industrial de la marihuana en la Cámara de Diputados y en el Senado de la República. En la actual legislatura sólo se han presentado dos iniciativas que se refieren a la despenalización del cáñamo con fines industriales, de acuerdo con el Sistema de Información Legislativa. Pero para la especialista Adriana Muro, el hecho de que Estados Unidos, históricamente promotor del enfoque prohibicionista, modifique su clasificación federal de la marihuana, es una oportunidad para reabrir la discusión en México.“Es interesante esta reclasificación no solo para Estados Unidos sino para el sistema internacional de drogas, porque recordemos que hay convenciones internacionales que también tienen estas listas restrictivas donde el cannabis está ahí. El que Estados Unidos, uno de los precursores del prohibicionismo, haya dado este paso nos lleva a hablar a nivel internacional de que necesitamos movernos, sobre todo las sustancias derivadas de plantas las tenemos que mover hacia otro lado”, comenta Adriana.La especialista recuerda que cualquier regulación sobre drogas debe tener un enfoque de Derechos Humanos para que las personas usuarias dejen de ser criminalizadas; de reparación, donde las personas que cultivan cannabis puedan ser beneficiarias de la industria y donde haya información, desde la evidencia, sobre su uso.LG