Derrumbe

Me da la impresión de que estamos asistiendo a la caída simultánea de todo aquello que nos habían venido presentando como sagrado, como superior, como fundamento de un futuro nuevo. El ser humano, incluso aunque lo pregone el botarate de Sánchez, es humano, siempre con los mismos fallos, siempre con los mismos errores, siempre con debilidades. Incluso el ser humano socialista, si es que existiera. El nuevo hombre que iba a emerger de la conquista del poder por el progresismo, el que nos anunciaban los Monedero, Iglesias o Montero, ha resultado ser igual que el viejo hombre, o sea humano. Pecador, diría la Iglesia católica.