La Audiencia de Madrid respalda sin fisuras la decisión del juez Juan Carlos Peinado de investigar por malversación a la mujer del presidente del Gobierno y a su asesora en La Moncloa, Cristina Álvarez, por dedicarse esta última a apoyar a Begoña Gómez en labores que se correspondían con su ámbito profesional o privado. Ya no solo Peinado ve indicios de malversación en el proceder de Gómez, excusa a la que se ha aferrado el sanchismo político-mediático para señalar la extravagancia de un juez. Los magistrados María del Rosario Esteban, José Sierra y Enrique Jesús Berges, de la Audiencia Provincial de Madrid, comparten que hay indicios suficientes para investigar tanto la esposa de Sánchez como su asesora. El auto es muy consistente y señala que la entrega de una funcionaria «las veinticuatro horas, los siete días de la semana, es más propia de una amiga interesada en los asuntos lucrativos de la ahora recurrente que en la fría labor de la encargada de la agenda y demás asuntos protocolarios».