Lejos de la espiritualidad abstracta, la banda chilena Candelabro propone en Deseo, carne y voluntad un ambicioso disco de rock conceptual, marcado por la calle, la duda sobre Dios y la identidad local. La banda recibe a Culto en su sala de ensayo para revisar un trabajo que reúne rock, poesía y espiritualidad, y que hoy concentra elogios de la crítica musical.