Ibiza ya nunca será lo mismo y hasta es probable que las banderas ondeen a media asta en la isla después de que Pocholo Martínez-Bordiú anunciara a toda España que lo deja, que se va, que adiós a la noche y aquellas interminables fiestas hasta el amanecer. Así lo ha proclamado ante las cámaras de '¡De viernes!' para dejar atónitos a todos los espectadores. Porque hasta esto se termina . «He estado en Pachá desde el año 83 y ya toca un poquito cambiar de tercio . Así que seguiré con mi camión y la noche se va a quedar sola. Y yo también, pero me buscaré la vida por otro lado», ha confesado Pocholo Martínez-Bordiú , conocido desde hace décadas como el nieto de Francisco Franco más díscolo e incansable animador de cualquier velada . Sonadas han sido sus aventuras en las fiestas y noches locas de Ibiza, una isla en la que se ha convertido en toda una leyenda . Pero, como decía la canción, «todo muere, es un hecho». Y hasta las noches de Pocholo en Ibiza se acaban. A sus 6r años, ha decidido jubilarse y emprender una nueva vida, explorar un mundo nuevo para él, como es el de vivir de día y expuesto a la luz solar . «Yo estoy a estrenar», ha sido lo primero que ha dicho en '¡De viernes!'. A Santiago Acosta no se le ha pasado que algo le sucedía en la pierna, pero antes de que los malpensados se pusieran a especular, el propio Pocholo Martínez-Bordiú salió al paso y aclaró que tenía un problema vascular por una aventura campestre en moto que salió regular y por un programa de cocina que le obligaba a estar de pie. Lo siguiente era hablar de pasado y futuro. Y ha desatado las primeras carcajadas en el plató cuando ha asegurado: « Nunca he salido mucho, la verdad ». Desde luego, sentido del humor nunca le ha faltado. Efectivamente, Pocholo lo deja. «En la vida todo es un cambio. El cambio es constante incluso en la materia . Luego es opcional el progresar. Entonces, Ibiza ha cambiado un poco. Empecé en los años 80 en Pachá y este año lo he dejado porque ha cambiado un poco la historia. Ha cambiado de dueño y la identidad es diferente. Entonces me he cortado la coleta», ha filosofado. El nieto de Francisco Franco ha aclarado que no lo echan, sino que es él quien se va , que es él quien abandona su trabajo en Pachá Ibiza. «He sido yo el que me he querido ir. Podría haber estado ahí más tiempo, pero también ha cambiado mucho la noche. Ya no es lo que era . Tampoco está mi amigo que era el dueño. Es todo diferente», ha contado con cierta melancolía. Pocholo Martínez-Bordiú ha comprobado en primera persona que el óxido del tiempo todo lo devora. Echa de menos aquellos tiempos en los que «todo el mundo se mezclaba», pero ha lamentado que ahora lo único que importa es «hacer caja». Así que ahora anhela esos momentos en los que era un titán que hacía incansable ese maratoniano recorrido por las cinco grandes discotecas de la isla en una misma jornada de fiesta y donde saludaba cinco veces a la misma gente. Qué tiempos aquellos en los que se forjaban amistades inquebrantables. Eso sí, Pocholo Martínez-Bordiú ha remarcado que deja la noche de Ibiza, pero no el día de la isla, puesto que en la pitiusa ha establecido su vida. Vivirá en su camión , ese vehículo que ha adaptado como casa y al que no le falta detalle. Ahora para ser feliz solo quiere un camión.