Los inamovibles del sector público

Cada cierto tiempo, cuando se habla de reforma del Estado, aparece una palabra que divide opiniones: nombramiento. Para algunos, es el gran logro laboral; para otros, el inicio de la desmotivación. Desde la perspectiva de miles de jóvenes que hoy intentan ingresar al servicio público, el nombramiento se ha convertido en una frontera invisible entre quienes buscan mejorar el sistema y quienes, amparados en su estabilidad absoluta, operan como si fueran intocables.