María José Campanario y el momento vital que atraviesa, a punto de pasar de nuevo por quirófano

María José Campanario volverá a pasar por quirófano en las próximas semanas debido a un problema en el hombro que arrastra desde hace tiempo y cuya evolución ha hecho necesaria una intervención . La noticia llega en un momento en el que su vida transcurre con normalidad y sin sobresaltos , dentro de una estabilidad que no es nueva, sino el resultado de años en los que ha logrado asentarse emocionalmente, familiarmente y también en su manera de convivir con la fama y los medios. A sus 46 años, Campanario ha atravesado episodios complicados relacionados con la fibromialgia y otras intervenciones médicas que marcaron etapas especialmente duras de su vida. Hubo periodos en los que los ingresos, el dolor y la presión mediática se mezclaban de una forma que hacía casi imposible mantener una rutina. Sin embargo, ese tiempo quedó atrás. Ese bienestar sostenido también se refleja en su relación con Jesús de Ubrique, una convivencia asentada desde hace tiempo y alejada del ruido que los acompañó en el pasado. Tras superar momentos de exposición intensa y titulares constantes, la pareja disfruta desde hace años de una vida familiar tranquila, discreta y muy blindada frente a la atención exterior. No se trata de un giro reciente, sino de una manera de vivir que llevan tiempo cultivando. Jesús ha estado presente en todos los momentos importantes de la salud de su mujer, acompañándola en cada proceso médico y siendo su apoyo . Y esto es algo que ambos han remarcado en sus pocas apariciones televisivas juntos, una de ellas en 'Emparejados', el programa de Joaquín Sánchez y su mujer. Otro de los pilares de esta etapa consolidada es la maternidad . En 2022 y de forma muy inesperada para el público que sigue los pasos de la pareja, y muy discreta, porque ellos apenas hicieron declaraciones al respecto, María José dio a luz al que es su hijo pequeño, el tercero de la pareja. La llegada del bebé aportó alegría y energía a la familia, como ya comentó el diestro, que explicó que les ha pillado en un momento de la vida en que pueden disfrutarlo con más calma . La odontóloga disfruta de su maternidad de forma más madura, más serena y con más experiencia. Su relación con la exposición mediática también ha cambiado de forma natural con el tiempo. En una etapa en la que la presión fue asfixiante, Campanario optó por reforzar su privacidad y cerrar por completo sus redes sociales e incluso utilizarlas con perfiles falsos. Hoy la situación es distinta: sus perfiles están abiertos y ella misma comparte pequeños fragmentos de su vida diaria , no demasiados, ni mucho menos todos los días, pero si sin esconderse. Son publicaciones sencillas, pero muestran la comodidad con la que vive desde hace tiempo. Ya no siente la necesidad de esconderse ni de blindarse de manera absoluta; simplemente comparte lo que quiere cuando quiere. Y eso es un gran cambio, que hace años hubiera sido imposible. En esa misma línea, también ha sorprendido positivamente su vuelta puntual a la televisión, interpretada como una señal de que se siente bien de salud, con energía y con ganas de afrontar pequeños retos profesionales sin que ello comprometa su bienestar. Durante mucho tiempo la pareja estuvo lejos de los medios, pero en los últimos años parece que ambos han cogido carrerilla y son varias las participaciones que han tenido en diferentes formatos. Aunque en pocos en los que se exponga su vida privada más allá de lo que ellos mismos quieran compartir, como por ejemplo en entrevistas con Toñi Moreno en 'Gente maravillosa' o en el ya citado 'Emparejados'. Además, María José Campanario formará parte de la nueva temporada de 'El Desafío', tal y como se ha anunciado hace solo unas semanas. Ya estuvo como invitada en la quinta edición, en la que participaba su marido, y se enfrentó a un reto de escapismo en una urna con agua. En ese contexto más amplio es donde se encuadra esta nueva operación, que es un paso más en un historial médico que ella ha aprendido a manejar e integrar en su vida desde hace tiempo. Probablemente muy a su pesar, todos hemos sido testigos de momentos complicados que ha vivido , como su ingreso en una clínica en 2017, por lo que quizá este nuevo bache sea un mero trámite en comparación con lo que ya ha tenido que vivir. Y lo hace apoyada por su marido, teniendo a dos de sus hijos ya mayores de edad y disfrutando mucho del pequeño con el que seguro necesitará ayuda después de la intervención, de la que todavía no se conoce fecha exacta . Quizá, su único pesar en este momento de su vida sea haber dejado la odontología, pues la estudió siendo adulta y con muchas ganas, se trasladó incluso a Portugal para poder hacerlo. Durante años trabajó en diferentes clínicas, pero al parecer su fibromialgia no le ha dejado continuar y en este momento no está ejerciendo. Pero quizá algún día vuelva a hacerlo, más por placer que por necesidad, pues es evidente que no lo necesita para seguir viviendo y hacerlo bien.