Hasta el rabo, todo es toro. El Córdoba se despide del 2025 superando al Mirandés para romper su sequía de seis partidos sin triunfos. Aunque Jacobo adelantó a los blanquiverdes en el primer minuto , un error en la salida de balón cordobesista permitió a Carlos Fernández igualar la contienda. Al igual que en el resto de encuentros, el atasco en fase ofensiva por parte del Córdoba fue notable y el partido se dirigía a un nuevo empate para el equipo dirigido por Iván Ania. Sin embargo, Sergi Guardiola se vistió de héroe para lograr los tres puntos en el tiempo de añadido. Para este partido, Iván Ania introdujo dos novedades en el once inicial, una siendo de última hora. El primer cambio obligado fue el de Álex Martín por un Rubén Alves que sufre una lesión de isquiotibiales. Antes del pitido inicial, Carlos Isaac se cayó de la alineación tras el calentamiento. En su lugar entró Alcedo , sumando así su primera titularidad como blanquiverde. Cuando todavía varios aficionados se encontraban ocupando sus localidades en Mendizorroza, el Córdoba golpeó primero. Tras un saque de esquina jabato, Fuentes comandó un veloz contragolpe desde la banda derecha. Aunque estaba algo escorado, el madrileño encontró la carrera de Jacobo y, ante la pobre salida de Nikic, el mediapunta blanquiverde no perdonó y puso el primero en el luminoso (0-1, min. 1). A pesar de verse sorprendidos, el Mirandés no bajó los brazos y empezaron a sumar hombres en el área blanquiverde, pero sin éxito. Aunque los burgaleses querían recomponerse, Requena y Fuentes tuvieron grandes ocasiones para poner el segundo en el partido a favor del Córdoba. Tras el frenetismo de los minutos iniciales, el partido se enfrió tras el primer cuarto de hora. El encuentro empezó a desarrollarse en el centro del campo, pero el equipo ribereño llegaba con más peligr o. Con el paso del tiempo, los pupilos de Iván Ania empezaron a dormirse en el encuentro, factor que aprovechó el Mirandés para igualar la contienda. Aunque Dalisson fue uno de los protagonistas en el primer gol blanquiverde, el hispano-brasileño se llenó de balón y le arrebataron el esférico cerca del área cordobesista. Con la zaga del Córdoba desdibujada tras esta pérdida, Carlos Fernández se plantó solo ante Iker Álvarez y, con una sutil ruleta, firmó el empate en Mendizorroza (1-1, min. 32). Lejos de reaccionar, al igual que en los recientes partidos, el juego ofensivo blanquiverde se congestionó . Las perdidas y la imprecisión se acumularon, lo que le dio algo más de libertad a un Mirandés que tampoco estaba teniendo mucho lustre. Con un partido escaso de fútbol, se llegó al descanso en Mendizorroza con todo por decidirse en los últimos cuarenta y cinco minutos. La segunda parte comenzó con protagonismo del Córdoba, pero el bloque bajo presentado por el equipo jabato empezó a ser un auténtico dolor de muelas para el equipo de Iván Ania. A pesar de que ambos equipos necesitaban sumar los tres puntos para cumplir sus respectivos objetivos, el duelo se mantuvo muy tibio. Un remate muy comprometido de Varela fue la única ocasión de los primeros quince minutos. Precisamente, el extremo del conjunto burgalés tuvo la mejor llegada de la segunda parte . Tras ganarle las espaldas a Xavi Sintes y a Álex Martín, Varela se puso muy nervioso ante Iker Álvarez y mandó fuera su remate. Respondió el Córdoba con un remate cruzado de Carracedo dentro del área rival. Aunque el remate fue repelido por Nikic, el rebote lo pescó un Adrián Fuentes que no supo aprovechar esta oportunidad. Tras esto, el Mirandés fue claro protagonista del partido . Iván Ania cambio el centro del campo para dar algo más de solidez a la medular al dar entrada a Pedro Ortiz y a Alberto del Moral por Requena y Dalisson. Aunque hubo una leve mejoría, los locales seguían avasallando la portería de Iker Álvarez. Como último recurso, Sergi Guardiola y Obolskii entraron en los últimos minutos en una búsqueda a la desesperada por el gol. Aunque ambos puntas no han estado acertados en esta temporada, este cambio valdría su peso en oro . Con un Mirandés mucho más a la defensiva en el tiempo de añadido, Carracedo recibió dentro de un área que era una auténtica maraña de piernas jabatas. A pesar de esto, filtró un gran pase a Sergi Guardiola que, con la punta del pie, desató la locura en Mendizorroza (1-2, min, 91). Tras un año sin lograr un gol oficial, el ariete de Manacor brindaba momentáneamente la victoria al Córdoba. Aunque el Mirandés lo intentó, la expulsión por doble amarilla de Juan Gutiérrez les lastró en los minutos finales y no pudieron arrebatarle la victoria al cuadro blanquiverde.