Durante años, la imaginación colectiva sobre la inteligencia artificial general (AGI) ha estado dominada por la figura del «modelo del genio»: un sistema monolítico, superinteligente y autoconsciente, capaz de resolver cualquier problema desde una posición de superioridad cognitiva. Esa visión, heredera de una tradición tecnológica centrada en la acumulación de capacidades en un solo punto, empieza a ser cuestionada por una línea emergente de investigadores que propone un paradigma distinto: el de la AGI como una economía distribuida de agentes. Un reciente artículo de Sébastien Krier y Benjamin Irving , «Distributional AGI Safety», publicado bajo el paraguas de Google DeepMind, al que he llegado gracias al profesor Tyler Cown, sugiere que la inteligencia general podría no surgir de un único... Ver Más