Hace unos días, el Ayuntamiento de Pozoblanco anunciaba que la cruz de Los Llanos cambiará de ubicación ante unas obras que pueden afectar su conservación. Una cruz que no es una excepción en la localidad, porque son muchas las construcciones de este tipo que se reparten por toda la localidad, todas ellas con un elemento común: el granito. Un informe de la Oficina de Patrimonio del Consistorio pozoalbense resalta la existencia de este tipo de elementos religiosos, algunas afectadas por las órdenes de carácter anticlerical en vigor durante la Segunda República y la Guerra Civil. Sin embargo, después de la contienda bélica algunas de las desaparecidas se reconstruyeron conformando un paisaje que todavía permanece.