El notable interés de diferentes empresas por instalarse en el parque tecnológico Rabanales 21 , en unas condiciones de las que no dispone actualmente el recinto en sus parcelas vacías, han motivado que el centro esté impulsando su ampliación . El proceso para su expansión está todavía en un estado gestacional, pero hay en paralelo algunos pasos muy destacados para hacerla realidad. El presidente de Rabanales 21, José Antonio Caballero, mantuvo una reunión hace unos meses con el alcalde del Ayuntamiento de Córdoba, José María Bellido (Partido Popular), para proponerle la necesidad que tiene el parque tecnológico de ampliarse para dar cabida a las reclamaciones de las empresas interesadas en instalarse en él y que no pueden hacerlo ahora mismo por las circunstancias del reparto de sus espacios. Esta petición parte debido a dos factores principalmente. En primer lugar, el Consistorio es el encargado de regular (y pintar) en el futuro Plan General de Ordenación Municipal ( PGOM , ahora todavía PGOU) cómo crece la ciudad y, lógicamente, también en esta zona. En segundo lugar, el Ayuntamiento, además de patrono del parque, también es uno de los grandes propietarios de los suelos anexos por los que se tiene que ampliar el centro. Capitulares acogió con muy buenos ojos darle solución a la necesidad de ampliación del parque. De hecho, la primera cuestión que se planteó es qué cantidad de metros cuadrados sería la óptima para esa expansión. La respuesta de los responsables de Rabanales 21 fue que la máxima superficie posible. Fruto de estas conversaciones, el alcalde anunció recientemente, entre ellos en el Debate del Estado de la Ciudad , que uno de los objetivos era la ampliación de Rabanales 21. Sobre la mesa está la posibilidad de que la ampliación abarque, al menos, 14 hectáreas (140.000 metros cuadrados). Sin embargo, es el punto de partida antes de afinar cómo se resolverá la cuestión de la expansión del parque tecnológico. De hecho, el presidente y el alcalde tienen pendiente una cita formal e institucional para avanzar en este asunto. Es más, habría podido producirse ya hasta en dos ocasiones, pero ha tenido que aplazarse por la agenda del titular del bastón de mando. En esta cita está previsto que puedan concretarse más aspectos sobre la ampliación. De momento, lo que es indudable es que el interés de las empresas por instalarse allí es lo que ha despertado a Rabanales 21 para impulsar su expansión. Según ha podido constatar este periódico, la multinacional Indra Group es una de las empresas que tiene sus ojos puestos en el parque si se produce una ampliación para sus futuras sedes de producción. No es la única. Tampoco la única vinculada al sector de la Defensa . Según las fuentes consultadas por ABC, el parque tecnológico está realizando gestiones para conseguir que Santa Bárbara, otro gigante de la producción y mantenimiento de vehículos militares, llegue como consecuencia de esta expansión. El Ayuntamiento tiene un papel capital en esta situación. Por su papel urbanístico, pero también porque es el propietario de 90.000 metros cuadrados en los suelos adyacentes a Rabanales 21. Entre ellos, los del recinto ferial. En principio y a falta de concretarse sobre el papel, la intención es que la expansión del parque se realice hacia la otra orilla del arroyo Rabanales . El objetivo son los terrenos que hay justo detrás del centro tecnológico y que limitan por el otro extremo con la parcelación de la Campiñuela. Los técnicos de Urbanismo guardan un escrupuloso silencio sobre cómo se está planteando esta expansión. De hecho, señalan que todavía no está dibujado en el futuro PGOM. Todavía quedaría una gran bolsa de suelo detrás del campus universitario de Rabanales de la Universidad de Córdoba y también tras saltar el arroyo de Rabanales. Precisamente, entre el campus de la UCO y el arroyo, Rabasa tiene prevista la construcción de una residencia de estudiantes. Y en su límite está la franja de suelo del Ayuntamiento. La expansión de Rabanales 21 supondría también un alivio para sus cuentas. No se puede olvidar que el parque está todavía en la fase inicial del cumplimiento del convenio de acreedores que se pactó tras su concurso. La situación del centro, sin embargo, es muy diferente a la que provocó aquella crisis. De hecho, recientemente ha sido noticia por la llegada de empresas. Entre las más importantes por su dimensión, están Escribano M&E, que inauguró la ministra de Defensa, o La Perla Food. La ampliación supondría otra inyección económica que le permitiría dar carpetazo definitivo a sus finanzas. De momento, la operación está en una fase embrionaria que debe dar un salto en los primeros meses del próximo año.