Jorge, vecino de Sevilla, realiza un homenaje a Vicente, el dueño de un kiosco al que "no conocía de nada": "Ha dejado su huella sin saberlo"

El programa Herrera en COPE ha sido el escenario de una historia conmovedora que ha resonado en toda España. A través de una carta leída en el espacio 'Reflexionando con Mario Alonso Puig', un joven ha rendido homenaje a Vicente, el quiosquero de su barrio en Sevilla que falleció recientemente y que, sin él saberlo, se convirtió en un pilar fundamental durante una de las etapas más duras de su vida. El joven relató que se encontraba en un momento personal muy complicado, marcado por la pérdida de su madre y otras dificultades. Fue entonces cuando un gesto tan simple como parar a comprar una revista le llevó a conocer a Vicente, quien, según escribió, "fue tremendamente amable" y con una broma le hizo "sonreír por primera vez en mucho tiempo". A partir de ese día, el estudiante comenzó a comprar una revista que no leía solo para "charlar con Vicente del tiempo, del fútbol o de las cofradías". No fue hasta después de su fallecimiento, al ver el quiosco "empapelado de mensajes de recuerdo" de los vecinos, cuando comprendió el verdadero impacto de Vicente. "Me dio pena no volver para decirle a Vicente cómo de bien me vinieron esos 2 minutitos cada día", confesó en su emotiva carta. El colaborador del programa, el doctor Mario Alonso Puig, ha calificado la historia como "absolutamente preciosa" y ha destacado el valor de las personas que, como Vicente, transforman la sociedad desde el anonimato. "Su huella la ha dejado en los corazones", ha afirmado Puig, quien ha añadido que "el nivel en el que estamos influyendo unos en otros es espectacular", un impacto del que a menudo no se es consciente, como muestra la película 'Qué bello es vivir'. La historia de Vicente ha servido de base para una reflexión sobre la sociedad actual. El presentador, Alberto Herrera, ha planteado cómo se ha perdido el hábito de saludar a desconocidos, a lo que Puig ha respondido que a menudo impera la desconfianza: "algunas personas se hacen la pregunta, ¿y este por qué me sonríe? ¿Qué me va a pedir?". Este patrón mental, según el experto, contrapone la idea de sonreír para pedir con la de sonreír para dar. Para ilustrar el poder de dar, Mario Alonso Puig ha compartido la anécdota de 'Sonrisas de Bombay', donde conoció a niñas en situación de extrema pobreza que sonreían "porque es lo único que tienen para regalarte". Esta reflexión subraya la grandeza de un gesto que, como en el caso de Vicente, puede cambiarle el día a una persona sin esperar nada a cambio. Finalmente, la conversación ha derivado hacia el futuro del quiosco y la "presión que puede sentir el nuevo quiosquero" al sustituir a una figura tan querida. Puig ha invitado a los vecinos a mirar al sucesor "con los ojos de la ilusión" y no "con los ojos de la comparación". La historia de Vicente, han concluido, es una lección para todos: una invitación a preguntarnos "en qué me parezco yo a Vicente" y cómo podemos impactar positivamente en los demás.