Teofilovic decide el derbi y refuerza al Lugo en el Anxo Carro

El derbi gallego comenzó con un Ourense CF atrevido y bien plantado sobre el césped del Anxo Carro. El equipo visitante asumió el control en los primeros compases y puso en apuros a un Lugo al que le costó encontrar fluidez, especialmente para superar la presión rival. Un gol anulado por fuera de juego y varias aproximaciones peligrosas avisaron a los locales, que sobrevivieron gracias a la falta de acierto ourensano y a la seguridad de Iker Piedra. El Lugo fue creciendo con el paso de los minutos y logró equilibrar el encuentro pasada la media hora. Sin dominar claramente, los albivermellos comenzaron a pisar área contraria y a cerrar la primera parte con mejores sensaciones, en un derbi con ritmo y alternativas. Tras el descanso, el Ourense volvió a avisar, pero el partido dio un giro a la hora de juego con la entrada de refresco desde el banquillo local. Yago Iglesias acertó de pleno con los cambios y el Lugo empezó a imponer su juego por las bandas, ganando profundidad y presencia ofensiva. La jugada del primer gol nació precisamente desde esa renovación. Una acción bien hilada acabó con Teofilovic, recién incorporado al terreno de juego, definiendo con acierto para abrir el marcador y desatar la alegría en la grada. Con el Lugo lanzado y el Ourense acusando el desgaste acumulado, el delantero serbio volvió a aparecer para firmar su doblete y colocar el 2-0, un golpe que parecía definitivo. Incluso hubo opciones para ampliar la ventaja, pero el derbi aún guardaba emoción. En el descuento, el Ourense recortó distancias y empujó hasta el final, generando nerviosismo en los últimos minutos. Sin embargo, el Lugo supo resistir y amarrar tres puntos de gran valor, confirmando su fortaleza como local y dejando una buena imagen ante su afición.