García-Page alerta tras el descalabro del PSOE en Extremadura: «Los muros amenazan con derrumbarse de nuestro lado»

El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha lanzado este lunes una advertencia tras el descalabro del PSOE en Extremadura, al asegurar que en el actual momento político «sobran excusas y falta autocrítica» y que los «muros» levantados por su propio partido «amenazan con derrumbarse de nuestro lado». García-Page ha realizado estas declaraciones tras felicitar públicamente al Partido Popular y a su candidata, María Guardiola, por una «victoria inapelable» en las elecciones autonómicas celebradas este 21 de diciembre en la comunidad vecina, unos comicios en los que el PSOE se ha hundidor. «Lo puedo decir porque el resultado ha sido muy evidente», ha señalado el presidente castellano-manchego, quien ha querido enviar «un abrazo muy solidario» al PP y, acto seguido, extender esa reflexión a su propio partido. «Permítanme que también lo haga en relación con el mío», ha añadido. En un discurso cargado de simbolismo, pronunciado durante la inauguración de un puente en Ciudad Real, García-Page ha contrapuesto la idea de liderazgo con la construcción de barreras internas. «Es muy difícil hablar de liderazgo sin ser puente. Y este puente es exactamente lo contrario a un muro», ha afirmado, antes de advertir de que «a veces los muros se terminan convirtiendo en barreras para ganar o para crecer». «En más de una ocasión —y ahora lo parece— esos muros amenazan con derrumbarse de nuestro lado», ha subrayado, en una alusión directa a la situación que atraviesa el PSOE tras los últimos resultados electorales. El presidente de Castilla-La Mancha ha criticado con dureza la falta de autocrítica en la política actual, especialmente dentro de su propio espacio. «Sobran excusas, fabricamos coartadas permanentemente y desviamos la atención de la realidad todo el tiempo que queremos. Incluso podemos seguir autoengañándonos, pero creo que sobra autoengaño y falta una autocrítica mucho más profunda», ha remarcado. Frente a esa deriva, García-Page ha reivindicado la «política útil» y el cumplimiento de los compromisos «independientemente del color político» de las instituciones, defendiendo que la única política que merece la pena es la que «consiste en ir avanzando». .