Tres días han sido suficientes para las labores de mantenimiento y conservación de una dolorosa granadina

La restauración y conservación del patrimonio es una de las labores más destacadas de las cofradías granadinas. Se presta atención a las imágenes centenarias que conforman su patrimonio, pero también a las nuevas tallas que han enriquecido el ámbito artístico de las hermandades. Ejemplo de ello es la Cofradía de la Lanzada, que restauró en 2022 a la Virgen de la Caridad, una dolorosa de vestir tallada por Miguel Zúñiga en 1986. Este mes de diciembre se ha procedido a una labor de mantenimiento y revisión técnica de conservación, que se define con carácter periódico. El encargado de este trabajo ha sido Óscar Martín, que fue uno de los artífices de la mencionada restauración que tuvo lugar hace tres años. Desde la corporación penitente se ha insistido en que “esta intervención responde exclusivamente a criterios de prevención y conservación, no existiendo incidencia alguna que motive preocupación”. Con este motivo fue retirada del culto el 17 de diciembre y volvió a su altar en la Parroquia de Dolores el 19 del mismo mes, por lo que solo han sido necesarios tres días para completar su intervención. Los trabajos desarrollados han permitido afirmar que su estado de conservación es correcto.