Contentos e infelices

Sin meterme en esas vueltas mentales que le pego a ciertas cosas y ver si la Euroliga es otro deporte diferente del baloncesto que vemos en la Liga ACB, lo cierto es que vaya espectáculo que hemos disfrutado esta semana pasada. Entre los partidos de la mejor competición de baloncesto al margen de la NBA y lo que hemos visto en nuestra liga nacional, a los que nos gusta el baloncesto nos deja contentos. Felices, no; porque esto tiene un componente tan emotivo que los resultados nos afectan, pero contentos sí.