Reconoció Alessio Lisci, entrenador de Osasuna, en su comparecencia en la sala de prensa de El Sadar tras la importante victoria que su equipo logró el pasado sábado contra el Alavés (3-0), sentirse “muy afortunado de tener dos delanteros así”. Se refería el italiano a Ante Budimir, que marcó los dos primeros tantos del conjunto navarro –el segundo de ellos de penalti–, y a Raúl García de Haro, que cerró la goleada rojilla exprimiendo los escasos seis minutos de juego de que dispuso saliendo desde el banquillo en sustitución del croata. Y no queda ahí la cosa, pues lo que ocurrió en el último partido con los dos atacantes de Osasuna se puede extrapolar al resto de la temporada, ya que entre ambos han marcado más de la mitad de los goles anotados por su equipo en lo que va de ejercicio.