El Centro de Arte Hortensia Herrero (CAHH) encara una etapa decisiva de su programación con dos hitos que consolidan su posición como uno de los grandes referentes culturales de España. Por un lado, el centro se encuentra en los últimos meses para visitar su actual exposición, una propuesta que ha marcado la identidad del CAHH desde su apertura y que ha atraído a más 400.000 visitantes nacionales e internacionales. El motivo de este cambio en la exposición es preparar una de las grandes citas artísticas del próximo año: la inauguración, el 28 de abril de 2026, de la primera exposición de Anselm Kiefer en la ciudad de Valencia . Con esta doble mirada —al cierre de una etapa y al inicio de otra de proyección internacional— el CAHH invita a públicos, críticos y medios especializados a situar a Valencia en el mapa imprescindible del arte contemporáneo. Tras más de dos años desde la apertura del Centro de Arte Hortensia Herrero, la exposición actualmente en curso entra en su recta final. Se trata de una última oportunidad para contemplar un recorrido expositivo que ha definido el carácter del centro, dialogando de manera única con el edificio y con una selección de obras clave de la colección. En los próximos meses, varias de las salas del CAHH serán desmontadas para dar paso a una transformación sin precedentes del espacio para acoger la exposición temporal de Anselm Kiefer. Un cambio que subraya el carácter vivo del centro y su apuesta por una programación ambiciosa y de alcance internacional. A partir del 28 de abril de 2026, el Centro de Arte Hortensia Herrero acogerá la primera exposición de Anselm Kiefer en Valencia, realizada en estrecha colaboración con el propio artista y diseñada específicamente para este espacio. La muestra ocupará seis galerías del centro, que serán completamente reconfiguradas para albergar una selección excepcional de obras procedentes directamente de su estudio. Esta exposición está llamada a convertirse en una de las grandes citas artísticas de 2026. La relación entre Hortensia Herrero y Anselm Kiefer se remonta a casi una década, cuando la coleccionista adquirió la obra Las flores del mal, presentada en la Summer Exhibition de la Royal Academy of Arts de 2016. Esta pieza puede verse actualmente en la sala noble del CAHH, junto a otras dos obras del artista que forman parte de la exposición permanente. Para la preparación de esta muestra, Hortensia Herrero se desplazó tanto al estudio de Kiefer en Barjac como al de París, participando activamente en la selección de las obras que viajarán a Valencia. El resultado será una exposición comisariada por Javier Molins, asesor artístico del CAHH, que podrá visitarse hasta octubre de 2026. La exposición ahondará en uno de los ejes centrales de la obra de Anselm Kiefer: el paisaje, entendido como espacio físico, histórico y simbólico. Junto a él, la historia, la mitología y la literatura conforman el núcleo conceptual de una muestra que dialoga con la poética del artista. Como afirma el propio Kiefer: «Yo pienso en imágenes. Los poemas me ayudan. Son como boyas en el mar. Nado hacia ellas, de una a la otra; entre ellas, sin ellas, me perdería». Entre las obras destacadas se incluirá «Danaë», una de las piezas de mayor formato realizadas por el artista hasta la fecha, con más de trece metros de ancho. En ella, Kiefer recrea el interior del aeropuerto de Tempelhof en Berlín y lo entrelaza con el mito griego de Dánae y la lluvia dorada de Zeus. Esta obra, presentada únicamente en una exposición en Nueva York en 2022, podrá verse por primera vez en Europa en el Centro de Arte Hortensia Herrero. Con esta ambiciosa programación, el CAHH se despide progresivamente de la primera presentación de la colección y se proyecta hacia 2026 con una propuesta destinada a convertirse en una referencia ineludible del calendario artístico internacional. Una cita que, desde ahora, ningún amante del arte debería perderse. Anselm Kiefer nació en 1945 en Donaueschingen, Alemania. En 1992 se trasladó a Francia, donde vive y trabaja entre París y Barjac, cerca de Aviñón. El artista estudió Derecho, Literatura y Lingüística antes de ingresar en la Academia de Bellas Artes de Karlsruhe, y más tarde en la de Düsseldorf, donde fue alumno de Joseph Beuys. En 1980 fue seleccionado para representar al Pabellón de Alemania Occidental en la 39ª Bienal de Venecia, y desde entonces sus obras se han mostrado en destacadas exposiciones individuales internacionales, en museos tan prestigiosos como el Art Institute of Chicago (1987); la Nationalgalerie de Berlín (1991); el Metropolitan Museum of Art de Nueva York (1998); la Fondation Beyeler de Basilea (2001); el Museo Guggenheim de Bilbao (2007); la Royal Academy of Arts de Londres (2014); el Centre Pompidou de París (2015); la Bibliothèque Nationale de France (2015); la Albertina de Viena (2016); el Museo Estatal del Hermitage de San Petersburgo (2017); el Museo Rodin de París (2017); o el Met Breuer de Nueva York (2018); entre muchos otros. Kiefer recibió el Premio Praemium Imperiale otorgado por Japón en 1999, y en 2008 fue galardonado con el Premio de la Paz del Comercio Librero Alemán. En 2007 se convirtió en el primer artista desde Georges Braque en recibir un encargo para una instalación permanente en el Museo del Louvre de París, y en 2018 su escultura site-specific Uraeus se exhibió frente al Rockefeller Center de Nueva York. En 2020, el presidente francés Emmanuel Macron encargó a Anselm Kiefer la realización de una instalación permanente para el Panteón de París.