Alumnos voluntarios de Valladolid se vuelcan para que ninguna persona vulnerable pase la Navidad en soledad

La Navidad es tiempo de reencuentros, pero muchas personas en situación de vulnerabilidad o sin hogar no tienen con quién celebrar estas fechas. Para combatir esta soledad, la Asociación de alumnos voluntarios de Valladolid, a salvo, ha puesto en marcha un año más varias iniciativas solidarias para ofrecer compañía y apoyo a quienes más lo necesitan en la ciudad. Una de las acciones más importantes de la asociación es su tradicional cena de Navidad, que este año ha reunido a 81 personas y 30 voluntarios. Según explica la presidenta de A Salvo, María Jesús Fornier, es "un día de entrega a los demás, donde nos dedicamos a servirles una cena engalanada, pero no solamente un buen menú que también, sino un menú lleno de amor, de calidez y de compromiso social". La respuesta de los asistentes, que habitualmente no disfrutan de productos como los langostinos, es siempre de gratitud. A esta cena se ha sumado una comida en el restaurante de la Casa de Galicia, financiada por esta última entidad. A diferencia de la cena, este evento se ha destinado a familias con niños que, pese a tener un trabajo, no consiguen llegar a final de mes, un perfil de pobreza que, según la asociación, ha aumentado en los últimos tiempos. La asociación ya está preparando una jornada de Reyes muy especial para que ningún niño se quede sin su regalo. Unos 35 niños disfrutarán de un desayuno en el Hotel Olid, una sesión de cine en los Cines Casablanca y, finalmente, la visita de Sus Majestades cargados de regalos. "Va a ser un fiestón con un nivelazo de hotel, de cine", comenta ilusionada Fornier, para quien esta celebración es su "regalo de reyes". A Salvo nació hace más de 15 años como un proyecto educativo para "estar al lado de los más débiles". Su objetivo es transmitir valores a los jóvenes "para que esto sea una pequeña asociación que les ayude a transformar la sociedad en una sociedad más justa, más solidaria". Fornier destaca que "compartir es algo maravilloso" y que esta labor ayuda a los jóvenes a valorar lo que tienen. La asociación cuenta con un rico voluntariado formado por unos 60 alumnos de bachillerato de varios institutos, universitarios y adultos. Además de las campañas navideñas, A Salvo impulsa otras iniciativas durante todo el año, como las "becas de a salvo". Este curso prevén conceder 30 becas de 300 euros cada una para aliviar los gastos escolares de familias con dificultades.