García Lobato, tras ser absuelto en la Púnica: "A nadie le gusta que le señalen como un corrupto"

El exalcalde de Almendralejo (Badajoz) José García Lobato ha afirmado este martes que su absolución en la trama de corrupción Púnica le ha devuelto la “tranquilidad” tras once años que califica de “muy duros”. Sin embargo, ha subrayado que la sentencia de la Audiencia Nacional ni repara ni borra el daño personal y político que ha sufrido durante todo este tiempo, asegurando que “no te puede hacer volver a la casilla de inicio”. García Lobato ha reconocido que el proceso judicial marcó de forma decisiva su trayectoria. En este sentido, ha recordado que han sido “momentos difíciles”, especialmente al ser señalado en una ciudad pequeña como Almendralejo, donde “todos nos conocemos”. “A nadie le gusta que le señalen como un corrupto”, ha confesado el exregidor, que ha lamentado los “ataques muy personales” sufridos. Por su parte, su abogado, Juan María Calero, ha calificado la sentencia de “justa en el resultado, pero absolutamente injusta en la demora”, al considerar desproporcionados los once años de procedimiento. El letrado ha defendido que García Lobato es “un hombre honesto” y que ha llegado al juicio “con la pena ya cumplida” debido al desgaste acumulado durante más de una década. El letrado ha subrayado que no existieron pruebas incriminatorias ni “reproche penal o administrativo alguno”. Ha explicado que, de un “rosario de acusaciones” iniciales que incluían pertenencia a organización criminal, cohecho o fraude, el juicio solo se siguió por una supuesta revelación de secretos y prevaricación, delitos que han sido completamente descartados. “La actuación del ayuntamiento, y particularmente de García Lobato, fue absolutamente impecable”, ha aseverado Calero. La defensa considera que la sentencia acredita la correcta actuación del exalcalde, que afronta esta nueva etapa con alivio, pero con la convicción de que el daño “no se puede borrar”. García Lobato no se plantea un regreso a la vida política en un papel protagonista, aunque ha señalado que queda a disposición del Partido Popular para colaborar “desde donde sea útil”. El exregidor ha destacado la llamada de la presidenta regional, María Guardiola, un gesto que ha valorado especialmente. Ahora, con su nombre limpio, entiende que ya no es “un elemento negativo para nadie” y mira “hacia adelante” para “ser lo más feliz posible”.