El arzobispo de Toledo mira a 2026 con un doble anhelo: la visita del Papa León XIV y "la paz en el mundo"

El arzobispo primado de Toledo, Francisco Cerro Chaves, ha expresado sus principales anhelos para el año 2026: la consecución de la paz mundial y una posible visita del Papa León XIV a la ciudad. En un mensaje con motivo de la Navidad, el arzobispo ha hecho balance de un 2025 marcado por la muerte del papa Francisco y la llegada del nuevo pontífice, un cambio que, asegura, ha vivido "con esperanza". Cerro Chaves ha descrito el 2025 como un año en el que, a pesar de acontecimientos como la muerte del papa Francisco en abril y la llegada del nuevo papa, León XIV, los hechos "se han vivido con esperanza". En su intervención en COPE Castilla La Mancha, ha reforzado la idea de que "Dios no nos deja" y "camina con nosotros", subrayando que "no existe ninguna situación que no la podamos vivir con Cristo". La mirada de la archidiócesis está puesta en la celebración del octavo centenario de la Catedral Primada de Toledo en 2026. El arzobispo ha adelantado que se ha preparado "un programa muy detallado" que incluirá exposiciones, encuentros y celebraciones con el objetivo de dar a conocer la historia del templo. Para Cerro Chaves, esta efeméride es una ocasión para redescubrir las "raíces cristianas" de la ciudad, ya que, en sus palabras, "no se entiende ni Toledo sin la catedral ni la catedral sin Toledo". Uno de los grandes anhelos ligados al centenario es poder recibir la visita del Papa León XIV a Toledo. El arzobispo ha confirmado que le invitarán y ha recordado los vínculos del pontífice con la provincia, que visitó cuando era general de los Agustinos. "Él recordaba con muchísimo afecto y con muchísimo cariño", ha señalado Cerro Chaves, quien asegura que insistirán en la invitación. "Hay un deseo inmenso por parte de todos de que venga el papa León XIV a Toledo", ha remarcado. Al ser preguntado por su principal deseo para 2026, el arzobispo no ha dudado: "la paz". Ha mostrado su preocupación por la "humanidad escasísima en paz" y conflictos como los de Gaza, Ucrania o Sudán. Tras recordar el mensaje de que "con la paz no se pierde nada, con la guerra se pierde todo", ha calificado la guerra como "la mayor de las injusticias". Finalmente, ha concluido con un mensaje de optimismo basado en las palabras del Papa Francisco: "Otro mundo es posible si se construye desde el diálogo y el mensaje de Jesús".