De padre director y tío actor, a Bastian Calva la actuación le viene desde la cuna, lo que no obnubila su constante preparación en pos de lograr el máximo nivel de calidad y tesón actoral, algo por lo que trabaja “desde que tengo memoria”. Primero, de manera empírica: siguiendo los ejemplos que veía en casa. Y posteriormente estudiando en México, Inglaterra y Estados Unidos."Vengo de familia de artistas, nunca me fue ajeno el mundo del entretenimiento, es algo con lo que tuve contacto desde chiquito — recuerda el creativo originario de Puebla en entrevista con MILENIO —. Pero no por eso dejo de prepararme, de trabajar en mi técnica; no solo es tener talento, va más allá".La visión actoral de Bastian CalvaEn casa, sus constantes inquietudes creativas siempre recibieron un "Hazlo" como respuesta, por eso era el primero en apuntarse a las obras escolares.Hasta que llegó "la primera vez que facturé": con un pequeño personaje en la película La boda de mi mejor amigo(2019), remake de la cinta estadounidense de 1997 protagonizado en México porAna Serradilla, Carlos Ferro y Miguel Ángel Silvestre. "De ahí en adelante, la industria del cine y la tele me abrazó totalmente".Seis años después de su debut oficial, el ímpetu de Bastian se mantiene voraz: "Siento que he madurado creativamente hacia un lugar donde me puedo expresar más, como mi evolución a la parte de producción cuando estaba en Los Ángeles. Por eso cada año tengo más responsabilidades".Responsabilidades que no ve con pesar, sino con ilusión. Responsabilidades que este 2025 lo llevaron al festival de Sundance y a lanzar a cines una película junto a Tony Dalton, Las Mutaciones.Basada en la novela homónima de Jorge Comensal, la cinta, que dirige Jorge Ramírez Suárez, pone a Bastian en el papel de Mateo, hijo de Raúl (Dalton), un abogado que, tras una cirugía urgente que lo deja mudo, busca recomponer su entorno familiar."Al principio, el personaje me fue ajeno porque es introvertido, mira muy hacia adentro, traer un caparazón, pero siempre es reencontrarte en lugares que pensarías que jamás estarías", reconoce el joven actor.Caso contrario: un rol con el que se identificó rápido fue el de Óscar enReviviendo la Navidad (2022). "Cada personaje es una técnica diferente; al final, lo que hago es que lo leo y del baúl interno voy sacando lo que el personaje me pida".El cine mexicano y su rol como productorAdmirador de celebridades como Olivia Colman, Johnny Depp, Merly Streep y Mario Iván Martínez, dice que un artista, en los tiempos que corren, tiene la responsabilidad "de comunicar; en mi caso, a través del medio audiovisual. Porque es importante entender que una historia puede afectar a gente, para bien y para mal. Por eso tengo claro el tipo de historias que me toca contar ahora, cada vez pienso más cómo una historia va a aportar".También abandera el valor de 'sentir', a veces es estigmatizado como debilidad. "Pero yo me dedico a lo que me dedico porque sé el poder de sensibilizar a la gente; no hay acto más bello y humano que ir a una sala de cine con gente que no conoces y sentir, reconectar".Sobre el cine nacional, lo aplaude y dice que todas las expresiones son válidas, incluso las comedias románticas, que suelen ser vapuleadas por la critica. "Están bien, hay gente que las disfruta. Por eso lo veo (al cine mexicano) con mucho amor, hay muchísimo talento".Aunque reconoce que faltan más espacios para la cantidad de artistas e historias que abundan, y "que no siempre tienen la oportunidad de llegar a las pantallas"."Es una carrera larga. Puedes tener suerte y al mes te toca el estrellato, pero si realmente quieres tener el oficio son años de no estar siempre frente a la cámara, de estar trabajando en proyectos que tardan o no salen a la luz — aconseja a los actores en ciernes —. Debes entrenarte como actor, como intérprete, porque al final te toca experimentar lo que siente el personaje".Calva reflexiona que en México "es importante que ames la profesión" porque habrá "momentos bajos", de poco trabajo. "Pero con chambitas o proyectos chicos uno se va a sentir bien... Somos un país que consume mucho arte".Como muestra de que lo suyo es actuar, en el sentido más amplio de la palabra, hace tiempo creó su casa productora, GBC Films: "Creo en el talento mexicano. Sé que a veces no se le da la oportunidad por varias situaciones, pero voy con la bandera de apoyar e impulsar"."Estoy en preproducción de mi próxima película, que vamos a filmar en París, pero también en México, donde voy a jalar a talento local", revela.Al cierre de la entrevista con MILENIO, Bastian Calva comparte que se sabe con un largo camino por delante hacia sus diferentes metas, pero confía en que llegará, apoyado por los valores aprendidos en casa; sus bastiones: "Ser responsable, puntual y, sobre todo, no perder el goce". View this post on Instagram hc